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Un momento de gran emoción para los pobladores de Huancaquito Bajo, caserío perteneciente a la provincia de Virú, se vivió cuando hace unas semanas se inauguró la Panificadora “Mi Barrio Progresa” SAC, que cumplía el sueño de los pobladores por tener acceso a pan fresco, del día, ya que hasta esa fecha debían consumir pan traído de muy lejos, generalmente del día anterior. Pero había muchos motivos más para estar contentos. A su vez, esta pequeña empresa  es el fruto de un largo trabajo promovido por Danper, empresa agroexportadora trujillana,  que dentro de su política de Responsabilidad Social ha venido impulsando algunos proyectos de desarrollo económico en sectores de bajos recursos en alianza estratégica con la Universidad de UTAH (USA), siendo éste el primero que ve la luz e  iniciando su vida productiva.
La Ceremonia tuvo como padrinos a la Gerente General  de Danper, Sra. Rosario Bazán, quien impulsó este proyecto desde sus inicios segura del potencial que tendrá en el progreso no sólo de los integrantes de la empresa sino también de la comunidad, y  al Gerente General, de Fito Pan, Sr. César Merino Vereau, quien brindó su generoso apoyo a los flamantes empresarios en su etapa de capacitación y prácticas. “Este esfuerzo es muy valioso, dijo la Sra. Bazán, porque demuestra lo que podemos lograr uniendo esfuerzos y siempre buscando el desarrollo. En este caso, se están beneficiando un grupo de habitantes de Huancaquito Bajo que han puesto desde el inicio mucho empeño, mucho trabajo, han sido perseverantes a lo largo del proceso que no ha sido corto, pero tendiendo claro su objetivo, han sabido llegar, y ahora ven hecho realidad lo que parecía un sueño, y estamos seguros de que van a llegar muy lejos, porque son gente luchadora y emprendedora, y personas así son las que hacen grande a nuestro país”.

Los flamantes empresarios son Martha De la Cruz, María Elena Macalapú Mendoza, Bernardita Azucena Fernández, Luisa Orfelinda Castillo Villajulca, Santa Margarita Gómez Narro,  Toribio Castañeda Neyra, Catalina Zúñiga de Trujillo.  Todos ellos son pobladores de la zona. Luego del largo camino recorrido se manifestaron sumamente satisfechos del apoyo recibido, y confiados del éxito que tendrá su trabajo. “Hubo momentos en que casi perdimos la esperanza,  porque surgían dificultades, pero gracias al apoyo que nos han dado hemos podido seguir adelante y hoy ya es una realidad nuestra panadería, estamos produciendo para nuestra comunidad y el pan se nos acaba todos los días”.

Este proyecto nació en el 2007, como parte de la primera experiencia de Danper promoviendo no sólo microcréditos  que generaran una oportunidad socioeconómica en sectores de muy bajos recursos, sino ofreciendo a la vez  capacitación, primero a los pobladores de la zona interesados en generarse una fuente de recursos, y luego a cada uno de los integrantes de los proyectos resultantes, capacitación que por su trascendencia y diversidad (gestión, contabilidad, mercadeo, etc.) tomó más de un año. En este proceso intervinieron instituciones como AMA y UPAO, proporcionando a los pobladores los conocimientos que les permitieran emprender con éxito y seguridad un proyecto de esta envergadura, lo que involucra  asumir el compromiso de un préstamo y sacar adelante una empresa, mediante su esfuerzo y perseverancia, lo que puede cambiar la vida no sólo de sus familias sino de toda su comunidad.


Fuentes
Texto: Danper
Imagen: Danper







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