Por Stakeholders
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La crisis climática es uno de los problemas globales que más preocupan a las autoridades internacionales. Al factor pandemia, se suma también el cambio climático que no tiene tregua. Y es que en el futuro se prevé que aumenten los niveles de dióxido de carbono debido a la irresponsable política de algunos países. Así lo refirió António Guterres en su participación en la Cumbre sobre la Ambición Climática.
Por ello, el Secretario General de la ONU ha hecho un llamado a que los países de todo el mundo que todavía no declaran el Estado de Emergencia Climática lo hagan. Hasta el momento, 38 de ellos ya lo han suscrito y la finalidad es que se sumen a este acuerdo con el objetivo común de alcanzar la neutralidad de las emisiones de carbono.
Guterres también sostuvo que la recuperación de la crisis sanitaria por el COVID-19 representa una oportunidad para redirigir las decisiones hacia una “senda verde de acuerdo con la Agenda para el Desarrollo Sostenible de 2030”. Asimismo, mostró su incomodidad ante el G-20, ya que miembros han planeado gastar más del 50% en la recuperación de sectores relacionados a la producción y consumo de combustibles fósiles.
“Esto es inaceptable. Los billones de dólares que se necesitan para la recuperación tras el COVID-19 son dinero que estamos pidiendo prestado a las generaciones futuras. Esto es una prueba moral. No podemos usar estos recursos para establecer políticas que carguen a las generaciones futuras con una montaña de deuda en un planeta roto”, subrayó.
Ante este escenario, añadió que urge crear una “Coalición Mundial para la Neutralidad del Carbono” con miras a mediados de este siglo. En su consideración, solo así se podrán mitigar las emisiones mundiales en un 45% al 2030 en comparación con los niveles del 2010. Además, se pronunció en favor del uso de las energías renovables como una vía para lograr la neutralidad.
“La tecnología está de nuestro lado. (…) La energía renovable es cada vez más barata cada día que pasa. La acción climática puede ser el catalizador de millones de nuevos empleos, una mejor salud y una infraestructura resistente. Pero recordemos que esta transición debe ser justa, y reconozcamos que el liderazgo de las mujeres es bueno para la acción climática”, señaló.
Por otro lado, valoró que el Reino Unido se haya comprometido a reducir sus emisiones contaminantes en un 68% y la Unión Europea en un 55%. En esa línea, instó a todos los sectores a trabajar a favor de la lucha contra la crisis climática. Todos deben cooperar para conseguir la neutralidad de carbono hacia el 2050.
“La acción climática es el barómetro del liderazgo en el mundo de hoy. Es lo que la gente y el planeta necesitan en este momento. Tenemos el plan: los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el Acuerdo de París sobre el cambio climático. Pero todos necesitamos pasar una prueba de credibilidad: convirtamos en realidad la promesa de un mundo sin emisiones contaminantes”, reflexionó.
