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Cincuenta y dos municipios provinciales y distritales que realizan acciones de gestión ambiental en beneficio de sus comunidades…
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Cincuenta y dos municipios provinciales y distritales que realizan acciones de gestión ambiental en beneficio de sus comunidades demostraron hoy que la gestión adecuada del ambiente no es un tema de recursos sino de decisión y voluntad política. Así lo ratificaron los alcaldes de municipalidades provinciales certificadas, como las de Villa Rica, Ramón Castilla, Datem del Marañón, Lamas, Andahuaylas, San Ramón, Comas, San Juan de Lurigancho y San Isidro, entre otras, que impulsan su gestión ambiental local.
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Ese es el caso del alcalde de la Municipalidad Provincial de Ramón Castilla (Loreto), Gregorio León Quispe Sánchez, quien ha logrado, gracias al trabajo coordinado con su equipo técnico, impulsar el tratamiento de residuos sólidos en su distrito, así como la elaboración de ordenanzas para la protección del río Amazonas.
Otro caso similar es el del alcalde de la Municipalidad Provincial de Datem del Marañón (Loreto), de dos años de creación, Emir Masegkai Jempe, quien además de llevar a cabo proyectos de manejo de residuos sólidos, implementará en su comuna un proyecto de relleno sanitario en la capital San Lorenzo, que supondrá una inversión de 110 mil soles; así como iniciativas para el ordenamiento territorial a través de ordenanzas que promoverán la protección de pueblos indígenas como los achuares, quechuas, aguarunas y kandoshes, entre otros. “Ya contamos con política ambiental provincial y estamos formando alianzas con entidades públicas, privadas y ONGs para captar inversión de otros países para nuestros proyectos ambientales”, señaló el alcalde Emir Masegkai. Así, muchos los alcaldes ya han sido capacitados en gestión ambiental como parte del Programa Gestión Ambiental Local para el Desarrollo Sostenible (GALS) que certificó hoy a 52 municipalidades a nivel nacional que cumplieron con el proceso del año 2008, las que se suman a las 57 certificadas desde que GALS realizó la primera convocatoria en el año 2005. Esta certificación ambiental es un reconocimiento que el Ministerio del Ambiente otorga a las municipalidades que voluntariamente priorizan una gestión ambiental orientada a la ecoeficiencia y al desarrollo sostenible. Así, la certificación GALS reconoce también la participación de la población en la toma de decisiones que afectan su entorno. A la fecha, son un total de 109 municipalidades certificadas que representan a cinco millones de personas, es decir, el 33% de la población del país; las cuales canalizan sus preocupaciones ambientales y alternativas de solución a través de las Comisiones Ambientales Municipales-CAM, como un activo espacio de participación. El programa GALS, que cuenta con el apoyo de USAID, se traduce en: 21 regiones del Perú que tienen municipalidades certificadas en gestión ambiental, 1,122 normas relacionadas al ambiente que son el resultado de la planificación de estas 52 municipalidades aliadas en la gestión del ambiente. Además, se ha logrado impulsar en cinco años del GALS: 69 planes de trabajo de residuos sólidos y 109 planes de capacitación y 40 proyectos de inversión pública, entre otros. Esta labor de capacitación y asistencia técnica en el tratamiento de residuos sólidos en municipios permitirá la ejecución de obras concretas gracias a la apertura de una línea de financiamiento de 86 millones de dólares otorgada por el gobierno japonés.
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