Tres líderes de la lucha mundial contra el hambre advirtieron que el mundo debe estar preparado para otra crisis de alimentos y adoptar medidas…
|
Tres líderes de la lucha mundial contra el hambre advirtieron que el mundo debe estar preparado para otra crisis de alimentos y adoptar medidas inmediatas para fortalecer la seguridad alimentaria en los países en desarrollo.
Las bajas reservas de alimentos, el aumento de precios de los cereales y la posibilidad de que algunos países productores de arroz tengan que importarlo durante el próximo año sugieren que el costo de los productos alimenticios podría subir en 2010. |
|
"Me preocupa la posibilidad de que pasemos de nuevo por esta situación…de que en 2010 podamos estar repitiendo algunos de estos problemas”, dijo el presidente del Banco Mundial, Robert B. Zoellick, durante un debate realizado en la Brookings Institution en la ciudad de Washington.
En el evento de la Brookings Institution participaron, además del presidente Zoellick, Josette Sheeran, directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), y Samuel Worhington, presidente de Interaction, la mayor alianza de ayuda y desarrollo de entidades no gubernamentales de Estados Unidos. “No creo que la crisis alimentaria haya sido un fenómeno único. Pienso que fue un llamado de atención”, dijo Sheeran, cuya organización entrega asistencia a más de 102 millones de personas en 78 países. Sheeran agregó que el costo de los cereales aumentó en un 17% y que los precios internacionales de los alimentos son dos veces superiores a los de hace cinco años. La crisis alimentaria “expuso las deficiencias del acceso a los alimentos, desde los poblados hasta los niveles nacional, regional y mundial. Y creo que lo que vemos actualmente con la crisis financiera es un tema complejo que está aumentando las cifras de las personas que sufren hambre en el mundo”. Casi 230 millones de niños y adultos despiertan cada mañana sin saber si contarán siquiera con un plato de comida, explicó Sheeran. “Esto es intrínsecamente desestabilizador. Es inaceptable y de hecho los números siguen subiendo. Sólo en los últimos dos años ascendieron de 846 millones a más de 1.000 millones”, dijo Sheeran. Algunos elementos que hicieron subir los precios de los alimentos hace dos años están aún vigentes, dijo Zoellick. Por ejemplo, las reservas de alimentos eran bajas antes de la crisis y continúan siéndolo. Los productos básicos se convirtieron en una “clase de activos” para la inversión, volviéndolos potencialmente más volátiles. Adicionalmente, existe hoy una relación mucho más estrecha entre precios de combustibles y de alimentos que antes de la crisis alimentaria. Cuando los precios de petróleo suben, también aumentan los costos de la comida, precisó Zoellick. Fuente:
Contenido:Banco Mundial. Imagen:Banco Mundial. |