Las empresas peruanas apuestan cada vez más por la comunicación digital. En este escenario, es necesario conocer cómo esta rama de la comunicación coopera con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) desde el sector privado.
La comunicación digital tiene un papel fundamental en los ODS en muchos aspectos. La revolución de la tecnología, y los distintos canales de información generados por esta, ha permitido una mayor accesibilidad de todas las personas a favor de la sostenibilidad. En el ámbito organizacional, el rol que juega la comunicación digital tiene una dimensión especial a nivel interno y externo, especialmente en la reputación.
En términos de sostenibilidad, el acceso a la información, desde cualquier punto del orbe, también se ha convertido en un eje para trabajar en salud, educación, desigualdad, género, innovación, entre otros temas, que conforman los 17 ODS establecidos en la Agenda 2030, hoja de ruta de las Naciones Unidas para un mundo más sostenible. Uno de los puntos de este listado de ODS versa sobre la importancia de las instituciones sólidas para una adecuada gobernabilidad, cuestión en el que la comunicación digital ha evidenciado nuevas oportunidades en los sectores privados y públicos.
Sin embargo, antes de continuar, vale hacer hincapié en que la comunicación digital es parte de una comunicación integral; por tanto, la perspectiva de toda organización debe ser una visión holística. Para Patricia Sánchez Urrego, decana de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Privada del Norte (UPN), lo anterior es indispensable para la vigencia de una empresa donde los distintos medios comunicativos converjan en un objetivo trazado.
“La comunicación digital es una rama más de la comunicación, la comunicación puede ser analógica o digital, y se potencia más si se tiene todo co-relacionado, lo llamado comunicación 3600, es importante que la empresa sepa que la comunicación no son piecitas sueltas, sino que va todo relacionado, y te brinda imagen y reputación”, explicó.
En el escenario nacional, la comunicación digital se ha priorizado en muchos sectores comerciales del mercado y las empresas han trabajado en ella siendo conscientes de su necesidad para mayores alcances. Para Álvaro Montúfar, director ejecutivo de Relaciones Institucionales y Proyectos Estratégicos y docente de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Piura, este desarrollo ha sido notable.
“Los reportes de inversión publicitaria en el Perú, publicados por CPI, señalan que en los últimos cuatro años la inversión publicitaria digital ha crecido de manera sostenida, consolidándose como el segundo medio más importante para los anunciantes del país, solo después de la televisión. En 2018, la inversión publicitaria en medios digitales alcanzó el 17% de participación, creciendo más del 60% versus el 2014”, detalló.
¿Por qué gestionar una comunicación digital?
Una de las razones por las que es necesaria una óptima comunicación digital, es la masiva presencia de distintos públicos, de todas las edades y condiciones, en las plataformas digitales. Tal motivo, hace necesario contar con un contenido digital relevante y trascendente en las circunstancias que se presenten para usarlos en momentos oportunos, así lo explicó Álvaro Montúfar.
“La gestión adecuada de la comunicación nos permitirá influir positivamente en la conducta de nuestros públicos y nos ayudará a construir una relación basada en la diferenciación, preferencia, lealtad, pero sobre todo, nos ayudará a construir influenciadores y defensores, que son figuras clave en situaciones de crisis”, sostuvo.
Implementar una buena comunicación digital va más allá de una búsqueda de rentabilidad económica empresarial, esta tiene que ver con la reputación que se forja desde el primer contacto con el target. Además, el uso de medios digitales para la comunicación entre los miembros de una organización es vital en conceptos de Buen Gobierno Corporativo (BGC) y sostenibilidad.
“El valor de la empresa no es solo económico, sino también es un tema de reputación, trabajando tanto con público interno y externo, por medio de la comunicación digital puedes potenciar mucho la comunicación con tus empleados, sobre todo, si estos a veces trabajan en otras regiones o países, también el tema de capacitación facilita mucho con estas tecnologías, al igual que la manera de fidelizar”, sostuvo la decana de la Facultad de Comunicaciones de la UPN.
Hay herramientas digitales que hacen posible una comunicación eficaz y rápida en las empresas. Desde el punto de vista de la sostenibilidad, la comunicación digital nos permite difundir las acciones empresariales competentes en, por ejemplo, temas medioambientales y sociales. Que el cliente sepa que la marca de la cual consume sus productos trabaja por la conservación de espacios verdes, reforzará procesos de fidelización e identificación; no obstante, es necesario siempre planificar y adecuar las herramientas según las metas.
“El uso de las herramientas siempre dependerá del propósito que perseguimos. Pero, en general, podríamos decir que la comunicación comercial de las empresas se refiere fundamentalmente al uso de la página web de destino, la gestión en redes sociales y algunos desarrollos de aplicaciones móviles. El uso de las herramientas está directamente relacionado con el consumo de los públicos”, comentó Álvaro Montúfar.
Asimismo, reforzó la idea de la particularidad que requiere cada organización, según sus características, en comunicación digital para afrontar una situación determinada. “La verdad es que no hay una fórmula única para gestionar estos procesos. Este tipo de decisiones dependen mucho de la particular situación, organizativa y económica, de cada empresa. Sin embargo, en cualquiera de los dos casos, es fundamental que las personas que gestionan estos procesos de comunicación tengan muy clara la identidad de la organización y los públicos a los que se dirigen, para desarrollar estrategias de comunicación asertiva y que influyan positivamente en la percepción de nuestros públicos”, enfatizó.
Como vemos, la comunicación digital es un recurso de gran valor que supone ventajas a nivel empresarial, siempre y cuando su uso sea de manera responsable por parte de quienes la gestionan. Sin ser el único espacio en el cual puedan servir, es claro su rol potencial en el logro de los ODS.