En la actualidad, los microplásticos son uno de los principales problemas a los que se enfrenta el ser humano. Unas pequeñas partículas, generadas por la descomposición de productos de plástico, que perjudican a los mares de España y a los océanos de todo el mundo; y que suponen un gran peligro para el medioambiente y los animales marinos. Para combatirlos, el avance tecnológico ha permitido la creación de diferentes sistemas, como uno que elimina el 99,9% de ellos en 10 segundos u otro que hasta filtra bacterias. La última innovación viene de la mano de un joven de 22 años, que ha creado un invento que acaba con ellos rápido y de forma segura.
Fionn Ferreira, un jóven de 22 años, ha ideado un nuevo sistema en la lucha contra la contaminación por microplásticos; que incluso se pueden encontrar en agua dulce, como en ríos, siendo también un riesgo para la salud humana. Criado a las orillas del mar en West Cork (Irlanda), Ferreira creó un invento basado en imanes que elimina estas diminutas partículas del agua de manera rápida, segura y sin dañar el medio ambiente. Una técnica innovadora que, incluso, es sostenible.
Este joven creció en el seno de una familia de constructores de barcos y desde pequeño sintió una profunda conexión con el mar. Algo que alimentó su pasión por limpiar el agua de microplásticos y le inspiró para encontrar una solución a este problema. «La gravedad era abrumadora y sentí una intensa urgencia por comprender los graves riesgos que plantea. El hecho de que estos plásticos se desintegren en fragmentos minúsculos, que acaban infiltrándose en nuestra cadena alimentaria y en el agua, está teniendo un efecto devastador en nuestra salud«, explica Fionn Ferreira en un comunicado publicado por la Oficina Europea de Patentes (OEP).
Un líquido magnético
Desde que era incluso más joven, este inventor trabajó en una innovadora solución para eliminar los microplásticos del agua. Para ello, consiguió crear un sistema que utiliza una mezcla única de ferrofluido, es decir, un líquido magnético, que consiste en un compuesto de nanopartículas ferromagnéticas disueltas en un solvente que es atraído por un campo magnético. Una sustancia que se adhiere a las partículas de estas diminutas partículas de plástico, separándolas del agua y permitiendo su eliminación mediante imanes.
Lo notable de este proceso es que retiene casi todo el líquido magnético, por lo que se puede reutilizar después de cada uso, mientras se eliminan los microplásticos. Y, lo que es más importante, este invento ideado por Ferreira también se puede usar con seguridad en el agua potable, lo que lo convierte en un potencial revulsivo en este sector; y hasta en una interesante opción a tener en cuenta para combatir la sequía provocada por el cambio climático que actualmente azota a prácticamente todo el mundo.
El innovador invento que elimina los microplásticos del agua
A diferencia de otros métodos, el proceso de este joven irlandés produce cero residuos y no requiere filtros ni productos químicos. Para su invento, Ferreira aprovechó la intuición de otro investigador, Arden Warner, físico del Laboratorio Nacional de Aceleradores Fermi de Chicago (Estados Unidos); y que fue autor de un estudio en el que argumentaba la posibilidad de usar polvo de magnetita, un óxido de hierro inofensivo para los seres vivos y abundante en la naturaleza, para limpiar el agua contaminada por derrames de petróleo.
Una teoría que el joven irlandés puso a prueba sobre 10 de los tipos más comunes de plásticos, como poliéster o PET, entre otros. Después de insertar los microplásticos -partículas de menos de 5 milímetros de diámetro- en el agua, primero añadió un compuesto oleoso y luego el polvo de magnetita. Tras ello, tomó las manchas de aceite magnetizado y analizó las muestras usando un espectrómetro casero y un microscopio digital. Unas herramientas con las que comprobó que el agua se «limpió» en promedio un 87,6%.
Limpiar los océanos
Ferreira también fundó Fionn & Co. LLC y la Green Journey Coalition Inc., una organización para continuar su misión de limpiar los océanos a nivel mundial y preservar el medio ambiente. El joven, de hecho, enfatiza en la importancia de unir esfuerzos para lograr un futuro libre de microplásticos. «La búsqueda de un futuro sin microplásticos es una causa noble y esencial que exige nuestra atención y acción. Todos los que se comprometen con esta causa están haciendo un bien inconmensurable a nuestro planeta, y no hay límite al bien que se puede lograr cuando trabajamos juntos», indica.
Con su organización, este joven busca esforzarse por «incrementar el agua limpia y segura, y su acceso a nivel mundial». La Green Journey Coalition está transformando el campo de investigación ambiental actual para brindar un mañana más seguro y saludable». Un invento que contribuye al ODS 6 de la ONU, ya que pretende apoyar la gestión sostenible de los recursos hídricos, las aguas residuales y los ecosistemas y mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación.