«Los antecedentes de El Niño han mostrado que se asiste a un aumento y a la aparición de múltiples enfermedades de transmisión vectorial y otras enfermedades infecciosas en los trópicos, en las zonas más afectadas por El Niño«, señaló Madeleine Thomson, responsable de los impactos climáticos de la organización caritativa Wellcome Trust.
El aumento se desprende de dos efectos de El Niño: precipitaciones no habituales que aumentan el número de sitios de reproducción de los transmisores como mosquitos y temperaturas más altas que aceleran la transmisión de diversas enfermedades infecciosas.
Por su parte, el secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Petteri Taalas explicó que la llegada de El Niño aumentará considerablemente la probabilidad de alcanzar récords de temperatura y desencadenar un calor más extremo en muchas regiones a nivel global y en los océanos.
Las oleadas de calor son «asesinas silenciosas» y «provocan de facto la muerte de más personas que cualquier otro tipo de eventos meteorológicos violentos», declaró Gregory Wellenius, director de un centro sobre el clima y la salud en la universidad de Boston.
En Europa más de 61.000 personas murieron a causa del calor el verano pasado, pese a que no había Fenómeno El Niño.
Cabe resaltar que julio de 2023 ha sido considerado como el mes más caliente jamás registrado en el planeta, cuando el efecto total de El Niño en las temperaturas mundiales solo se manifiesta en general al año siguiente del inicio del fenómeno.
Pérdidas económicas
A inicios de agosto, el canal de Panamá, por el que transita el 6% del comercio marítimo mundial, informó que las bajas precipitaciones, que según los meteorólogos fueron exacerbadas por El Niño, obligaron a los operadores a restringir el tráfico por temores de sequía, lo que podría reducir los ingresos en 200 millones de dólares.
Además, de acuerdo con un estudio publicado en mayo en la revista Science, los fenómenos El Niño han costado a la economía mundial más de 4 billones de dólares en los años posteriores.
Los impactos de El Niño y el calentamiento climático deben «provocar 84 billones de dólares de pérdidas económicas en el siglo XXI», según este estudio.