
La industria minera está trabajando para reciclar el agua dulce, al mismo tiempo que desarrolla tecnologías de extracción directa de litio (DLE), en su carrera por reinventar la forma de producir el metal para baterías, fundamental para la transición a la energía verde, explicaron ejecutivos.
El incremento de la demanda mundial por litio ha despertado un gran interés por las tecnologías DLE, que usan menos terreno y pueden funcionar mucho más rápido que la minería de roca dura y las balsas de evaporación de salmuera, las formas tradicionales de procesar el metal blanco.
Sin embargo, algunos tipos de tecnologías DLE necesitan 180 toneladas métricas o más de agua para producir una sola de litio, un consumo que ha desatado la polémica en regiones áridas que buscan conservar el agua potable y que ha contrarrestado la supuesta promesa de la DLE de frenar el gran consumo de agua de la industria minera.
Ahora, los promotores de la DLE se apresuran a impulsar el reciclado de agua dulce mientras perfeccionan la tecnología, como parte de una campaña para asegurarse de no perder el apoyo de la comunidad antes de que su industria tenga la oportunidad de ser plenamente comercial.
“Si no somos capaces de reciclar bien el agua y reducir nuestra huella hídrica, nos van a machacar”, señaló John Burba, presidente ejecutivo de International Battery Metals (IBAT) , en la conferencia Reuters Events Industry Transition, llevada a cabo esta semana en Pittsburgh.
“El DLE es un proceso que requiere grandes cantidades de agua”, explicó.
Burba explicó en la conferencia que IBAT -que ha mantenido conversaciones para conceder licencias de su tecnología DLE a Exxon Mobil, Chevron y otras empresas- recupera el 98.5% del agua dulce utilizada durante su proceso de producción de litio, y aspira a elevar aun más el porcentaje.
La empresa privada EnergyX, que tiene a General Motors como inversor, afirma que puede recuperar hasta el 90% del agua dulce, una cifra que sus científicos trabajan para aumentar.
“Lo que queremos es llegar a cinco, diez o quince toneladas (métricas) de agua dulce por tonelada de litio”, dijo Teague Egan, presidente ejecutivo de EnergyX.
“¿Cuántas veces podemos reciclar? Esa es realmente la gran pregunta”, afirmó Colwell. E3 Lithium, que cuenta con el respaldo de Imperial Oil de Exxon, empezó a probar tres tecnologías DLE el mes pasado en Alberta y pretende instalar instalaciones de reciclado de agua conforme se haga comercial, indicó el director general, Chris Doornbos.
“Acabas teniendo una pequeña instalación de tratamiento de agua con tu instalación de procesamiento para poder reutilizar esa agua una y otra vez”, dijo Doornbos.
Cada uno de los desarrolladores dijo que esperan que al menos una tecnología DLE se lance comercialmente a inicios de 2025, un paso que se espera que impulse a toda la industria.
El impulso para reducir el consumo de agua, de acuerdo con los ejecutivos, debería ayudar a mitigar con el tiempo algunas preocupaciones de la industria de los vehículos eléctricos sobre el impacto medioambiental de la minería frente a la creciente demanda de litio.