¿Lo que viene ocurriendo en La Convención nos pone frente a una nueva escalada de conflictos en el país?Estamos frente a la continuación de una dinámica de conflictividad social que lejos de detenerse por el proceso electoral en curso, encuentra en éste condiciones que le permiten hacerse eventualmente más disímiles de lo que fuera meses atrás. Así, en La Convención se reitera la incapacidad del gobierno nacional para prever, atender y resolver conflictos que no son de hoy sino de larga duración.
La protesta por el gas se anunció como un gran paro macro regional pero se ha concentrado sólo en La Convención y no en otras regiones, ¿esto significa que las reivindicaciones son meramente locales?
La dimensión local es lo que explica la fuerza del conflicto en La Convención. Las demandas del Frente de Defensa son tres: una que es la macro regional, tiene que ver con el rechazo a la exportación del gas; la segunda tiene que ver con la defensa del santuario nacional de Megantoni para evitar que sea afectado con la construcción de dos gasoductos de TGP (y en este punto se ha logrado un éxito, porque SERNANP acaba de rechazar por segunda vez el estudio de impacto ambiental lo que demuestra que lo que se exige no es irracional); y la tercera demanda tiene que ver con la construcción de una planta de procesamiento de gas en Quepashato y no en la costa. En otras palabras, la fuerza de La Convención tiene que ver con una plataforma que tiene elementos locales importantes pero que tiene también un elemento macro regional.
En todo caso, la oposición a la exportación del gas se estaría convirtiendo en una plataforma macro regional.
Está más o menos claro que no es una plataforma macro regional y que la expectativa de distintos sectores que se oponen a la exportación del gas y la posibilidad de una movilización macro regional incluso nacional, por el momento no es una realidad.
El gobierno siempre señala que en estos casos existe una conspiración contra el país, con la presencia de sectores radicales que incluso obedecerían a intereses extranjeros, ¿Se pueden descartar por completo afirmaciones de ese tipo?
Tales afirmaciones son absolutamente irresponsables y están desgastadas. Hay que recordar que el Premier Velásquez Quesquén aceptó negociar hace pocos meses con el Frente de Defensa y la negociación se frustró por su decisión de retirarse de la misma argumentando que habían llegado tarde, cuando en realidad se produjo una manipulación grosera de parte del gobierno. Ahora, se han mantenido con el mismo cálculo permitiendo que transcurran 8 días, y después de este tiempo han tenido que retroceder. Hay que subrayar que el SERNANP ha dado la razón a la población en uno de los puntos de su demanda, demostrando adicionalmente que hay una dosis de racionalidad importante y significativa. Por ello, hablar de manipuladores o de la presencia de sectores ligados al ALBA como ha sido dicho explícitamente y como viene siendo agitado en algunos medios de comunicación, es absolutamente irresponsable.
¿Es posible que esta protesta se agudice y devenga en algo como el Baguazo que es lo que algunos dirigentes han planteado?
Ese tipo de declaraciones hecha por el presidente regional del Cusco, es también poco responsable. El Frente de Defensa ha señalado ayer por última vez su disposición a dialogar y de acuerdo a lo que dicen los medios hoy día, el Premier ha señalado su disposición a viajar a la zona para negociar. Si esto se hubiera hecho hace varios meses no estaríamos en este escenario.
¿Qué opinión te merece la estrategia del premier Velásquez Quesquén de señalar que no negociará en tanto persistan las protestas? ¿Es la forma adecuada en que el gobierno debe abordar la solución a los conflictos?
De ninguna manera. Lo primero que tendría que hacer el gobierno es reconocer que estamos en este conflicto por su incapacidad de negociar en el momento en que se esperaba al Premier a una hora determinada y él se presentó a otra. A lo que se suma que trató de hacernos creer a todos que la película había sido al revés. Por lo demás, el Frente de Defensa, de acuerdo a lo que dicen algunos medios hoy día, estaba señalando su disposición a dialogar sin condiciones. La amenaza de represión del gobierno es una amenaza que se hace frecuentemente cuando éste se siente acorralado por su propia incapacidad.
¿Tiene fundamento exigir la no exportación del gas y negar la opción de una venta a Chile?
Lo que hay que señalar es que el conflicto alrededor de si se exporta o no se exporta, cuánto se exporta y a quién se exporta, ha sido generado por la falta de transparencia tanto del gobierno anterior como de este. La opinión pública y la enorme mayoría de peruanas y peruanos no tenemos claro cuánto gas hay y cuál es el ingreso que obtiene el país por su explotación. Las versiones son múltiples y el propio Presidente de la República dice un día que no hay absolutamente nada de negociaciones, que el contrato está cerrado, etcétera, y al día siguiente dice vamos a revisar el contrato porque no es posible que acá paguemos más caro por el gas que lo que obtenemos por su exportación.
En este contexto general a mí me da la impresión de que el tema de la exportación del gas está vinculado a la posibilidad del mercado interno pero deben analizarse las cosas con frialdad, ya que hay una cantidad de gas que en el corto plazo no será posible consumir porque no se ha avanzado en el cambio de matriz energética ni en la instalación de redes. ¿Cómo debe avanzarse? Resuelto el tema del mercado interno se debe exportar el gas a quien pague más: si España paga más entonces el gas debe ir España; y si quien paga más es Chile, me da la impresión que el destinatario será Chile. El problema de la relación con Chile debe observarse en toda su complejidad. Ahora bien, este sentimiento de no exportar a Chile es también responsabilidad de este gobierno por la manera cómo ha manejado las relaciones con el país del sur.
¿El tema del gas continuará en la agenda y será parte del debate electoral regional y nacional?
Sería deseable que -en forma responsable- sea uno de los temas importantes en la campaña nacional como parte de la discusión del tema energético y del tema de manejo de recursos naturales en el país. Me da la impresión de que en el escenario regional, incluso más limitadamente en el escenario provincial de La Convención, va a ser sin ninguna duda, parte del discurso electoral. Los candidatos van a tener, mal que bien, que señalar su posición frente a lo que está en discusión y frente a la actuación del Frente de Defensa de La Convención.
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