Reducir las emisiones de metano y de hollín a la atmósfera, además del dióxido de carbono (CO2), permitiría frenar más rápidamente el calentamiento global, según un estudio que publicará la revista Science el 13 de enero.
Esta medida también podría prevenir millones de muertes anuales provocadas por la contaminación del aire, a la que contribuyen en gran medida las millones de toneladas de metano y el hollín descargadas cada año a la atmósfera por la industria petrolera y petroquímica.
Además, según los autores de este estudio internacional, la reducción de estos contaminantes en la atmósfera podría mejorar el rendimiento de ciertos cultivos, especialmente en los países en desarrollo.
Los beneficios económicos resultantes de la reducción de las emisiones de metano y hollín compensarían ampliamente los costos asociados con el desarrollo de medidas para lograr esta reducción, destacaron los autores del estudio.
Reducir la concentración de CO2, el principal gas de efecto invernadero responsable del 50 por ciento de este fenómeno, sigue siendo crucial para ayudar a reducir el calentamiento global resultante de las actividades humanas desde el comienzo de la revolución industrial.
Pero dado que el dióxido de carbono permanece durante mucho tiempo en la atmósfera, llevará décadas reducir su volumen antes de revertir el actual proceso de calentamiento global.
Por el contrario, el metano y el hollín desaparecen más rápidamente de la atmósfera, dijo Drew Shindell, climatólogo de la NASA y autor principal del estudio.
El metano y el hollín contribuyen al 30 y 20 por ciento al calentamiento global.
El modelo informático utilizado en el estudio muestra que 14 medidas de bajo costo en su mayor parte, como instalar un filtro de partículas para los motores diesel, reducirían 0.5 grados el calentamiento esperado para 2050.
Fuente: Reforma.com