- Gremio empresarial considera que, luego de superar la emergencia sanitaria, serán necesarias medidas para recuperar cadena de pagos y garantizar empleos.
La Cámara de Comercio de Lima planteó al Poder Ejecutivo la formación de una “comisión de recuperación económica” que se encargue de analizar las medidas urgentes que se deberá adoptar una vez superada la emergencia generada a raíz de la pandemia del coronavirus, a fin de enfrentar las secuelas que dejará el estado de emergencia y aislamiento social en materia laboral, generación de empleo, financiamiento y estabilidad de las empresas.
Dicha comisión debería estar integrada por los ministerios de los sectores productivos, encabezados por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), así como por la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat), el Banco Central de Reserva (BCR) y la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS), además de representantes de los gremios empresariales, trabajadores y colegios profesionales.
“La prioridad en este momento es proteger la vida y bienestar de la población, pero no debemos perder de vista que, una vez superada esta crisis, se percibirán sus efectos en el empleo, la cadena productiva, el sistema financiero o el comercio exterior. No se trata de ser alarmistas, sino de entender que también es momento de prevenir y tener respuestas ante una situación complicada, para que el país no salga de una crisis para entrar en otra”, subrayó la presidenta de la CCL, Yolanda Torriani.
Señaló que, si bien las normas promulgadas por el Poder Ejecutivo disponen la continuidad de actividades de determinados sectores considerados esenciales y otros referidos a servicios, lo cierto es que a mediano y largo plazo la situación económica de todas las pequeñas, medianas y grandes empresas será afectada, al igual que la de las personas de a pie, por lo que urge, desde este momento, ir delineando las medias que se necesitarán.
“En la medida que se han suspendido las actividades y operaciones de gran parte de las empresas, no importa su tamaño, la cadena de pagos se ha interrumpido”, anotó.
Precisó que, si bien la SUNAT ha dispuesto facilidades para las pequeñas y medianas empresas, lo cierto es que son innegables las dificultades que éstas y las grandes empresas deberán enfrentar a mediano y largo plazo para cumplir no solo con sus compromisos con el sistema bancario, sino también para pagar planillas, impuestos y servicios.
“Es verdad que, en este momento, el gobierno debe garantizar la salud y la vida de la población y las medidas adoptadas, aunque duras, son necesarias. Pero también es imprescindible que, a través del Ministerio de Economía y Finanzas, diseñe desde ya un plan de emergencia que permita a las empresas salir de la crisis a la que nos está llevando esta pandemia. Al igual que ha ocurrido con otros países, el Perú va a tener que recomponer su aparato productivo al día siguiente de superada esta situación”, subrayó.
Torriani recalcó que esta crisis mundial tendrá secuelas económicas que afectarán el empleo, el normal desarrollo de las empresas y la economía en general.
“Frente a esta posibilidad cercana, esperamos que el Ministerio de Economía y Finanzas lidere ese plan de recuperación para que el sector productivo nacional sobreviva después de este duro periodo y pueda seguir generando empleo formal, pagando impuestos y creando los recursos que permiten luchar contra la pobreza y mejorar la calidad de vida de las personas”, precisó.
La presidenta de la CCL sostuvo que “no se trata de rescatar empresas privadas, sino de asegurar el empleo adecuado y evitar se sobrecargue la cuenta de apoyo social; se trata también de trabajar en conjunto para impulsar de nuevo la inversión privada que ha sido uno de los principales factores que explica el crecimiento de nuestro país desde hace casi tres décadas”.
Torriani sostuvo que el sector empresarial peruano ha mostrado su disposición a colaborar, trabajando de forma coordinada con las autoridades para hacer frente a esta enfermedad, pero insistió en que una vez que todo se normalice, deberá enfrentar una crisis económica producto de la paralización de sus actividades.