
La industria automotriz está en plena transformación hacia un futuro electrificado. El informe «Movilidad Eléctrica Preparada para el Futuro de TCS 2025» señala que el 90% de los fabricantes cree que las mejoras en la tecnología de baterías impactarán significativamente en el diseño y el rendimiento de los VE en el corto plazo. Sin embargo, factores como la disponibilidad de estaciones de carga, la autonomía limitada y los costos de producción aún generan incertidumbre tanto en consumidores como en fabricantes.
Si bien el 56% de los consumidores está dispuesto a pagar hasta $40,000 por un vehículo eléctrico, el 60% sigue considerando la infraestructura de carga como una gran preocupación. Además, aunque la reducción de emisiones es una de las principales motivaciones para la compra, el 48% de los expertos en electromovilidad cree que los VE pueden generar tanto impacto ambiental como el que buscan reducir.
Infraestructura de carga: el mayor obstáculo
Uno de los principales retos para la masificación de los vehículos eléctricos es la falta de puntos de carga accesibles. Según el informe, el 74% de los fabricantes de VE considera que la infraestructura de carga sigue siendo el mayor obstáculo para el crecimiento del sector. Este problema es especialmente relevante en países donde la red de estaciones de carga es insuficiente o inexistente, lo que limita la viabilidad de los VE en regiones menos desarrolladas.
A pesar de esto, el 55% de los fabricantes ya ha comenzado a invertir en innovación para mejorar la tecnología de baterías, con el objetivo de aumentar la eficiencia y reducir los tiempos de carga. Además, el 78% está invirtiendo en reducir los costos de producción para hacer que los VE sean más accesibles.
Autonomía de las baterías: ¿Cuántas millas son suficientes?
Otro punto crucial es la autonomía de los VE. El 41% de los consumidores considera que un rango de 200 a 300 millas por carga es suficiente, mientras que el 31% espera que los autos eléctricos ofrezcan entre 300 y 400 millas.
Para abordar esta preocupación, los fabricantes están apostando por nuevas tecnologías de baterías que mejoren la eficiencia energética. De hecho, el 90% de los fabricantes cree que los avances en la tecnología de baterías optimizarán la autonomía y la velocidad de carga en el corto plazo.
Costos de producción y accesibilidad
El precio sigue siendo un factor clave en la decisión de compra. Aunque los costos de los VE han disminuido en los últimos años, todavía son más elevados en comparación con los vehículos de combustión interna. Según el informe, el 78% de los fabricantes ya está invirtiendo en reducir los costos de producción para hacer los VE más asequibles.
Asimismo, el sector de flotas comerciales ve con buenos ojos la movilidad eléctrica, con un 53% de empresas que señala la reducción de costos operativos como una motivación clave para la adopción de VE. Esto demuestra que la transición hacia la electrificación no solo responde a una agenda ambiental, sino también a una lógica de ahorro económico a largo plazo.
Perspectivas y futuro de la movilidad eléctrica
El informe de TCS 2025 deja en claro que la movilidad eléctrica se encuentra en un punto de inflexión, con grandes oportunidades, pero también desafíos significativos. Si bien casi dos tercios de los consumidores consideran un VE como su próximo vehículo, los fabricantes aún deben superar barreras como la infraestructura de carga y la autonomía.
El futuro de la industria dependerá de la capacidad de los fabricantes para innovar y hacer que la electromovilidad sea una opción viable para todos. Con avances en baterías, reducción de costos y expansión de redes de carga, los vehículos eléctricos están cada vez más cerca de consolidarse como la norma y no como la excepción en el transporte global.