Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) alertaron de varios casos de malaria en el país. Esta noticia ha puesto en la mira a los mosquitos. De acuerdo con los especialistas la malaria podría volverse más común en Estados Unidos conforme aumenten las temperaturas en ese país, lo cual está relacionado con el cambio climático.
El incremento de las temperaturas permite a los mosquitos crecer más rápido y vivir más tiempo. Antes morían durante los duros inviernos en muchos lugares, sin embargo, ahora tienen más probabilidades de sobrevivir más tiempo para aumentar sus poblaciones. El calor también acelera el tiempo que demora un parásito o virus en madurar dentro de un mosquito.
«Al calentarse la temperatura, más se acorta ese proceso. Por lo tanto, estos mosquitos no solo viven más tiempo, sino que se vuelven potencialmente infecciosos antes», explica Oliver Brady, profesor asociado de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.
Otra ventaja del calor para los mosquitos, es que hay más gente al aire libre por la mañana y a última hora de la tarde.
De acuerdo con la investigación de Climate Central, en Estados Unidos ha incrementado el número de «días de mosquitos», es decir, aquellos en los que se dan las condiciones de calor y humedad que tanto disfrutan.
Los investigadores analizaron datos de más de cuatro décadas en casi 250 localidades y descubrieron que al menos el 70% de ellas se habían vuelto más beneficiosas para los mosquitos.
Pese a que las casi 200 especies de mosquitos que hay en Estados Unidos son inofensivas, hay una docena que son transmisoras de enfermedades a los humanos como los virus del chikungunya, el dengue, el zika y el Nilo Occidental.
En el África subsahariana, donde la malaria ha tenido consecuencias devastadoras, el cambio climático está contribuyendo a los mosquitos a ampliar su área de distribución, según una investigación reciente.
Según un informe de la Universidad de Georgetown, los mosquitos Anopheles transmisores de la malaria se han desplazado unos 6,4 metros al año hacia zonas más elevadas y casi 5 kilómetros al año hacia el sur.
Es un ritmo que sigue el cambio climático y podría perjudicar a zonas que nunca han sufrido de malaria y que no están preparadas, aseguró Colin Carlson, biólogo especializado en cambio global de la Universidad de Georgetown y coautor del informe.
Otra enfermedad potencialmente mortal es el dengue, este flagelo aumenta en un mundo más cálido. Esta enfermedad ocasiona fiebre, náuseas, vómitos, fatiga y diarrea y, los peores casos, hemorragias internas y la muerte. No hay cura o tratamiento específico para el dengue, por lo que los afectados solo deben sobrellevar los síntomas.
Confirman 201 muertes y más de 130 mil casos de dengue en Perú
En la actualidad, Perú se enfrenta al peor brote registrado de dengue transmitido por mosquitos, que ha infectado a unas 150 mil personas y provocado más de 250 muertes.
De acuerdo con los especialistas, las lluvias y el calor han generado las condiciones perfectas para los mosquitos.