Banco Mundial luchará contra la corrupción

El Grupo del Banco Mundial informó hoy que designó al ex tesorero australiano Peter Costello; al estudioso y ex diplomático de los Estados Unidos, Chester Crocker; al ex Ombudsman de Filipinas Simeon Marcelo, y al jurista suizo Mark Pieth para integrar su nueva junta asesora independiente, encargada de prestar asesoramiento acerca de las medidas de lucha contra la corrupción.

Los nombramientos se ajustan a la recomendación formulada en el examen independiente realizado por el Departamento de Integridad Institucional del Banco (INT) bajo la dirección del ex presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos Paul Volcker.

Costello fue tesorero de Australia desde 1996 hasta 2007 y presidió el Foro de Cooperación Económica de Asia y el Pacífico y el Grupo de Ministros de Hacienda del G-20; Crocker fue secretario de estado adjunto de los Estados Unidos para África desde 1981 hasta 1989 y también presidió la junta del United States Institute of Peace; Marcelo cumplió funciones de Ombudsman en Filipinas y de fiscal en el juicio político contra el ex presidente Joseph Estrada, y Pieth preside el Grupo de Trabajo de la OCDE sobre cohecho en las transacciones comerciales internacionales y es profesor de la Universidad de Basilea.

“Cada una de estas cuatro personas cuenta con un distinguido historial en la función pública y contribuirá a asegurar que el Grupo del Banco Mundial haga un uso eficaz de cada dólar para superar la pobreza” afirmó el presidente del Grupo del Banco Mundial Robert B. Zoellick. “El Informe Volcker fue de mucha utilidad para señalar las esferas en las que podríamos introducir mejoras. A medida que avanzamos con nuestra labor más amplia en materia de buen gobierno y lucha contra la corrupción, seguiremos extrayendo enseñanzas del Panel Volcker”.

La nueva junta tiene por objeto proteger la independencia y fortalecer la rendición de cuentas del INT al prestar asesoramiento en materia de políticas y procedimientos, así como respecto de las interacciones del departamento con el Grupo del Banco Mundial. Asesorará a Zoellick y al Comité de Auditoría del Grupo del Banco Mundial acerca del desempeño del INT y la aplicación de las recomendaciones conexas del informe del Panel Volcker.

Leonard McCarthy, vicepresidente del Departamento de Integridad Institucional del Banco Mundial, expresó: “El Grupo del Banco Mundial está llevando la lucha contra la corrupción al siguiente nivel. Mientras que el INT cumple la labor crucial de investigación, sólo mediante una sólida coordinación en toda la institución, unida a una dedicación manifiesta de nuestros países asociados, podremos dar solución al problema de manera progresiva y eficaz”.

Los nombramientos se producen un año después de formuladas las recomendaciones del Panel Volcker dadas a conocer el 13 de septiembre de 2007. En ese momento el Banco se comprometió a adoptarlas en su totalidad. Desde entonces, la institución ha tomado medidas en esferas importantes, entre ellas:

– Elevar la categoría del INT de una dirección a una vicepresidencia, que es responsable directamente ante el presidente del Banco;
       
– Contratar al primer vicepresidente del INT, Leonard McCarthy, que ha sido jefe de la Dirección de Operaciones Especiales de Sudáfrica, conocida como Scorpions;
       
– Crear una unidad de servicios preventivos dentro del INT para ayudar a incorporar las enseñanzas aprendidas de las investigaciones del INT en las actividades habituales del Banco y proporcionar a los equipos de los proyectos apoyo para la mitigación de riesgos en las primeras etapas, y
       
– Adoptar procedimientos para tramitar y permitir el acceso del público a información derivada de las investigaciones a través del sitio web del INT, que en la actualidad abarca informes relativos a casos correspondientes a la República Democrática del Congo y Honduras, así como también un examen detallado de la ejecución de los proyectos correspondiente a India.

La labor del INT es una parte crucial de la estrategia del Banco sobre el buen gobierno y la lucha contra la corrupción, que fue aprobada por unanimidad por el Directorio Ejecutivo del Banco en marzo de 2007. Esta estrategia tiene tres pilares fundamentales: i) crear instituciones y sistemas nacionales capaces, transparentes y responsables, prestando asistencia a los países; ii) ampliar la alianza con las instituciones multilaterales y bilaterales de desarrollo, la sociedad civil, el sector privado y otros agentes en iniciativas conjuntas para abordar la corrupción, y iii) reducir al mínimo la corrupción en los proyectos que reciben financiamiento del Banco, evaluando el riesgo de corrupción de los proyectos en las primeras etapas, por ejemplo, a través de la labor de la unidad de servicios preventivos del INT; investigando activamente las alegaciones de fraude y corrupción, que es la función del INT, y fortaleciendo la vigilancia y supervisión de los proyectos.