Por Stakeholders
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Sanipes realiza inspecciones en la bahía de Sechura para asegurar que dichos productos obtengan una certificación sanitaria y de exportación.
El Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes) ha comenzado la fiscalización en nueve zonas de producción de conchas de abanico, ubicadas en la bahía de Sechura (Piura), para lograr que este recurso cuente con la certificaciones adecuadas para su consumo y comercialización en los mercados extranjeros.
Las conchas de abanico constituyen uno de los recursos que más aporta a la riqueza marítima peruana. Estos moluscos abundan en la bahía de Sechura, en la región Piura, lugar que se ha convertido en la fuente principal de producción nacional y exportación de conchas de abanico.
Por tal razón, Sanipes ha iniciado este proyecto de supervisión y fiscalización del perfecto estado de este recurso y su trazabilidad, para su posterior comercialización. Con esta iniciativa, no solo se mejora la calidad de los productos marinos peruanos, los cuales serán certificados y tendrán un control de calidad para ser exportados a la Unión Europea, Estados Unidos, Japón, China, entre otros; sino que también se asegura una sinergia entre la autoridad sanitaria, los coordinadores sanitarios, las asociaciones locales de productores y los maricultores para culminar con éxito este proyecto.
“La bahía de Sechura representa más del 80% de la producción nacional de conchas de abanico, por lo que esta actividad acuícola es una de las principales en la región y brinda puestos de trabajo directo e indirecto a unas 25.000 personas de Piura. El fin último es que todas las áreas se clasifiquen bajo el nuevo modelo de Fiscalización en Proceso Basada en Riesgos, el cual generará condiciones para que los agricultores mejoren su producción y aceleren sus procesos comerciales.”, señalaron representantes de Sanipes.
Este avance va de la mano con la legislación actual promulgada por el Ministerio de la Producción, que en agosto de 2018 mediante Decreto Supremo N.° 004-2018-PRODUCE, modificó la norma de revaluación sanitaria en un periodo no mayor a seis años.
