El comercio ilegal de especies y la pérdida de su hábitat son las principales amenazas de la fauna silvestre.
Perú tiene una vasta riqueza de flora y fauna en diversas regiones del país. Sin embargo, de acuerdo con el director general de Diversidad Biológica del Ministerio del Ambiente (Minam), José Álvarez, existen amenazas cada vez más frecuentes como la pérdida del entorno ambiental y el comercio ilegal que aún persiste contra las especies.
En el 2019, la requisitoria del comercio ilegal obtuvo más de 5 mil especímenes de vertebrados, 2,001 ranas acuáticas, 974 pericos de ala amarilla, 408 tortugas motelo y 191 monos capuchino. Los lugares con mayor comercialización de aves y reptiles son Estados Unidos y Europa, mientras que Asia conforma el principal mercado de jaguares y de tortugas de agua dulce.
Asimismo, la caza o pesca incidental es una de las actividades que más afectan a la diversidad marina.
Bajo esta perspectiva, el Ministerio del Ambiente (Minam) busca posicionar la diversidad biológica como un activo. A través de su Dirección General de Diversidad Biológica se encarga de brindar asistencia para la conservación, recuperación y uso sostenible de los ecosistemas. Además, desarrolla el uso de recursos naturales sostenibles para conservar la biodiversidad y vivir en armonía con la naturaleza.
En el marco del Día Mundial de la Vida Silvestre se recuerda el objetivo de recuperar a las especies clave para la restauración de los ecosistemas.