Por Stakeholders
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La ciudad de Cali, Colombia, refuerza su seguridad ante el despliegue de drones en la Zona Verde de la COP16, epicentro de la conferencia climática global que congrega a líderes, activistas y representantes de diversos sectores.
En esta área, las autoridades han desplegado estrictas medidas de vigilancia, incluyendo un centro de monitoreo antidrones equipado con tecnología avanzada, donde se ha detectado la presencia de más de 30 drones en las últimas horas. Ocho de estos han sido inhibidos tras confirmarse que no representan una amenaza directa.
“La gobernación del Valle ha dispuesto de una sala de monitoreo antidrones, donde no solo hay capacidad de inhibición física, sino también una articulación entre la Fuerza Aérea, el Ejército y la Policía Nacional”, indicó Ana María Sanclemente, secretaria de Seguridad de la Gobernación del Valle del Cauca. Este centro cuenta con una cobertura de hasta 17 kilómetros, permitiendo detectar y controlar drones que se encuentren en el perímetro de seguridad establecido en la COP16.
Según Sanclemente, los drones detectados pertenecen mayoritariamente a empresas privadas y ciudadanos que desconocen las restricciones de vuelo en la zona. La sala de monitoreo antidrones es parte de una inversión en seguridad de 3.500 millones de pesos, que incluye cinco inhibidores distribuidos en puntos estratégicos de la ciudad, con especial concentración en el centro de Cali.
El equipo antidrones no solo permite inhibir la señal de los drones no autorizados, sino que también permite que las autoridades asuman el control de los dispositivos en el aire, asegurando una respuesta rápida ante cualquier potencial amenaza. Este despliegue forma parte del operativo integral que busca garantizar la seguridad de los asistentes de la COP16, a raíz de los reiterados ataques aéreos que se han registrado en el departamento vecino del Cauca .
