
En un escenario en el que la transición energética y la modernización de la infraestructura se han convertido en prioridades, Perú apuesta por dos iniciativas complementarias que prometen transformar la vida de miles de familias y dinamizar la economía nacional.
Por un lado, el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de masificación del gas natural para siete regiones del centro y sur del país. Con el respaldo del sector privado, encabezado por conversaciones con la empresa Cálidda, el plan busca llevar gas natural a hogares, negocios e industrias a un precio nivelado –similar al que se paga en Lima–, garantizando una energía limpia y asequible que impulse inversiones en distribución y genere empleo. El ministro Jorge Montero enfatizó que este proyecto “democratiza la economía de cientos de miles de familias” al poner a disposición un combustible peruano que favorece la transición energética y reduce la dependencia de recursos importados. Además, acuerdos estratégicos con empresas como CNPC y Pluspetrol asegurarán que la producción y el transporte del gas se integren eficazmente a la cadena de valor, abriendo el camino hacia una mayor producción y exploración de este recurso.
Por otro lado, en el foro PPP Américas 2025 –el evento más importante de asociaciones público-privadas en América Latina– Perú sorprendió al presentar un portafolio estratégico que supera los US$ 70 mil millones en oportunidades de inversión en infraestructura, energía, transporte, saneamiento e industrialización. Organizado en conjunto por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y ProInversión, el foro se consolidó como una plataforma para estrechar lazos entre el Estado y el sector privado. Durante este encuentro, altos funcionarios y representantes del sector privado compartieron avances, retos y proyecciones de proyectos que ya han movilizado más de 11,500 millones de dólares, y se proyectan adjudicar inversiones con contratos que podrían extenderse hasta por 60 años.
La sinergia entre estas iniciativas evidencia una visión de largo plazo en la que la modernización de la infraestructura energética se alinea con la ampliación de proyectos APP, que abarcan desde la masificación del gas natural en regiones estratégicas hasta el desarrollo de parques industriales y la expansión de redes de agua y saneamiento. Mientras el MINEM trabaja en decretos que definan el Plan de Desarrollo Gasífero para Cusco 2025-2030, el portafolio de proyectos APP reafirma el compromiso del país con la inversión responsable, la transparencia y la integración territorial.
El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez-Reyes, y otros expertos coinciden en que estos proyectos, además de mejorar la calidad de vida de la población, generan las condiciones necesarias para atraer capitales tanto nacionales como internacionales. La participación de empresas de renombre y la apertura al diálogo con inversionistas del Golfo Pérsico son muestras de la confianza que el país está generando en el ámbito de las asociaciones público-privadas.
En definitiva, el Perú se posiciona como un hub regional de innovación y desarrollo sostenible, donde la masificación del gas natural y el ambicioso portafolio de APP trabajan de la mano para cerrar brechas de infraestructura, generar empleo y garantizar un impacto social positivo. Con políticas claras, marcos regulatorios sólidos y la colaboración entre el sector público y privado, el país traza hoy el camino hacia un futuro más justo, inclusivo y resiliente.