El cáncer sigue siendo una de las principales causas de muerte en el Perú, arrebatando alrededor de 35,000 vidas al año y sorprendiendo con diagnósticos a más de 70,000 personas. A pesar de los avances en medicina, el acceso a evaluaciones y tratamientos oportunos sigue siendo un desafío inmenso, sobre todo para miles de peruanos que viven en zonas alejadas, donde la atención médica es un lujo y la prevención una palabra lejana.
En este sombrío escenario, surge Mauchis Contra el Cáncer, una iniciativa inspiradora liderada por el cirujano oncólogo Mauricio León Rivera. Más que una organización, Mauchis es una luz de esperanza que se enciende para iluminar la vida de millones de peruanos, llevando prevención y detección temprana contra el cáncer hasta el último rincón del país.
Una plataforma innovadora para una necesidad vital
Mauchis nació un 19 de octubre de 2019, como un sueño visionario: ofrecer información sobre el cáncer de mama y cuello uterino a cada peruano, sin importar dónde se encuentre. Desde el 2020, a través de su plataforma digital, cualquier persona con acceso a internet puede informarse sobre factores de riesgo, recibir consejos sobre estilos de vida saludables y resolver sus dudas sobre el cáncer.
Recientemente, la plataforma ha dado un paso adelante incorporando la tecnología GPT-4, lo que le permite ofrecer respuestas aún más precisas y personalizadas, especialmente a través de Facebook y WhatsApp, transformándose en un sistema ágil, moderno y accesible para todos.
“Con Mauchis estamos culturizando a la gente sobre el cáncer, explicando cómo se puede prevenir”, explica a Stakeholders el doctor León Rivera, quien agregó que el nombre de Mauchis nació por el sobrenombre que tiene su menor hijo.
Una imagen de esperanza en cada rincón del Perú
Lo que realmente distingue a este proyecto es su red de clínicas móviles, que recorren sin descanso kilómetros y kilómetros para alcanzar a las comunidades más vulnerables de nuestro país. Un bus blanco y verde, equipado como una clínica sobre ruedas, recorre las carreteras del Perú, llevando exámenes preventivos como mamografías y ecografías. Para muchos, es la primera vez que ven este tipo de equipos o escuchan cómo el diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Es una presencia esperanzadora que, en cada parada, siembra conocimiento y oportunidad en quienes antes no tenían acceso a este cuidado vital.
“Nuestro objetivo es llegar a zonas carentes de recursos fuera de Lima. Hemos llevado nuestros buses clínicos a regiones como Cajamarca, Arequipa, Puno y Tacna, brindando atención gratuita a quienes más lo necesitan”, comparte con orgullo el doctor Mauricio León Rivera, el corazón de esta noble causa.
Impacto y resultados que hablan de una transformación
En tan solo un año, Mauchis ha tocado la vida de miles. Su plataforma digital ha recibido miles de consultas, demostrando un creciente interés de los peruanos en cuidar su salud. En tanto, la clínica móvil ha permitido que decenas de personas detecten a tiempo la presencia del cáncer, dándoles una oportunidad real de lucha.
«Hasta el momento, hemos atendido a casi 5,000 pacientes y detectado alrededor de 150 casos sospechosos de cáncer. Sin embargo, la mayoría de los casos en Perú llegan en etapas avanzadas, lo que subraya la urgente necesidad de promover la detección temprana», señaló.
Soñando con un futuro lleno de vida
El camino no ha sido fácil, y el equipo de Mauchis enfrenta desafíos constantes. La brecha digital y el acceso limitado a internet en áreas rurales dificultan la difusión de la información en todos los rincones. Para superar estos obstáculos, están trabajando en adaptar su plataforma a entornos con conectividad limitada y explorando opciones de puntos de acceso comunitarios.
La visión de Mauchis no se detiene. Con el apoyo de alianzas estratégicas con instituciones privadas, planean duplicar su flota de clínicas móviles, integrar aún más sus servicios con sistemas de salud y ampliar su cobertura geográfica. Además, el doctor León Rivera sueña con que Mauchis cruce fronteras, convirtiéndose en un recurso invaluable para comunidades en otros países.
“Sueño con que algún día Mauchis no solo esté disponible en Perú, sino en diferentes países y en múltiples idiomas, sirviendo a comunidades de todo el mundo que necesitan acceso a salud”, afirma León, vislumbrando un futuro donde esta esperanza llegue aún más lejos.
Mauchis Contra el Cáncer representa más que una organización: es un llamado a la acción, una muestra de que la esperanza puede llegar a cada rincón y salvar vidas.