Deshidratación: Perder más líquido del que se ingiere afecta a las funciones vitales del cuerpo

Las jornadas de calor extremo pueden dañar la salud y estar bien hidratado es fundamental para evitar el golpe de calor.  Cabe resaltar, que perder más líquido del que se ingiere afecta a las funciones vitales del cuerpo

¿Cuáles son las consecuencias para la salud cuándo hay calor extremo?

Al subir las temperaturas, corres el riesgo de sufrir deshidratación. Esto sucede cuando el cuerpo pierde más agua de la que se ingiere.

Por ello, mantenerse hidratado es clave para el adecuado funcionamiento del organismo, ya que el agua es el componente mayoritario de las células del cuerpo. Por ello, traslada los nutrientes a las células y retira de las mismas los residuos.

Además, contribuye a regular la temperatura corporal a través de la redistribución del calor desde los tejidos activos hasta la piel y mediante el enfriamiento del cuerpo a través del sudor.

Cabe resaltar que el agua es un nutriente esencial. No tenerlo hace que el organismo no pueda sobrevivir ni funcionar adecuadamente, por ello, es importante incorporar la cantidad y calidad adecuada. En el caso de los adultos lo recomendable es consumir entre dos y tres litros al día.

Además de ser esencial para combatir la sed y reponer líquidos, también es necesaria para las funciones fisiológicas más básicas, como, la regulación de la presión arterial y la temperatura corporal, la hidratación y la digestión. Además, estar hidratado es de suma importancia en el estado de ánimo y el rendimiento cognitivo.

Por su parte, expertos de la Asociación Argentina de Nutricionistas recalcaron solo el 2% de deshidratación de pérdida de masa corporal, ya puede impactar en la capacidad cognitiva de una persona, es decir, en los procesos intelectuales que le permiten percibir, pensar y recordar. Y en las mujeres, afectaría su estado de ánimo y emociones. 

¿Qué es la deshidratación?

La deshidratación sucede cuando una persona consume o pierde más líquido del que ingiere, y su cuerpo no tiene suficiente agua y otros fluidos para realizar sus funciones con normalidad. Si los fluidos perdidos no son devueltos, la persona se deshidratará.

Toda persona puede deshidratarse, sin embargo, esta afección es más riesgosa en niños y adultos mayores. 

“Las causas más frecuentes de deshidratación en niños son la diarrea y los vómitos intensos, según especialistas de la Clínica Mayo de EEUU-. Los adultos mayores naturalmente tienen un volumen menor de agua en sus cuerpos, y pueden tener enfermedades o tomar medicamentos que elevan el riesgo de deshidratación”.

¿Cuáles son los síntomas de deshidratación?

Según los especialistas la sensación de sed es el primer indicio de deshidratación; es por eso que es clave tomar agua antes de llegar a este estado.

Los signos de deshidratación originan:

– Cefalea, delirio, confusión.

– Cansancio (fatiga).

– Mareos, debilidad, aturdimiento.

– Boca seca y/o tos seca.

– Ritmo cardíaco alto pero presión arterial baja.

– Pérdida de apetito pero tal vez ansias de azúcar.

– Piel enrojecida (roja). Pies hinchados. Calambres musculares.

– Intolerancia al calor, o escalofríos.

– Constipación.

– Orina de color oscuro (para tener en cuenta, la orina debe ser de un color claro pálido, a más color, es señal de que más líquido necesita el cuerpo)

Recomendaciones para mantenerse hidratado

– Llevar siempre una botella de agua y recargar cuando se vacíe.

– Optar siempre por agua en vez de bebidas azucaradas, hasta en las comidas.

– A los que no les agrada el agua, pueden agregarle sabor, puede ser de ayuda: una rodaja de lima o limón para hacerla más agradable.

– Ingerir alimentos que tengan un alto contenido de agua, como sopas, frutas y verduras.

– A los que les cuesta beber mucha agua, pueden empezar con dosis más pequeñas repartidas a lo largo del día.