Hace pocos días se presentaron situaciones de emergencia vinculadas con incendios perpetrados en zonas forestales. Bajo ese contexto, la Secretaría de Salud de Bogotá brindó una serie de recomendaciones para tener cuidado con las columnas de humo provocadas por las llamas.
Por un lado, la recomendación principal es evitar acercarse lo más que se pueda a los lugares donde se registraron los incendios para evitar inhalar directamente el humo. En caso de encontrarse cerca de la zona de influencia, lo más seguro es cubrir nariz y boca con tapabocas o pañuelos húmedos para que las partículas no perjudiquen la salud respiratoria.
La segunda recomendación tiene relación con las personas que están cerca de una fuente de humo, hollín o material particulado. Las autoridades indican que es importante mantener abiertas las ventanas y puertas para que las partículas salgan y no se queden impregnadas en el hogar.
Además, se deben limpiar superficies y pisos usando paños húmedos para que el polvo no quede impregnado.
Adicionalmente, se sugiere identificar y hacerles seguimiento a las personas con mayor vulnerabilidad; tales como menores de edad, adultos mayores, embarazadas o pacientes con enfermedades pulmonares.
Por otro lado, se recomienda limitar los esfuerzos y la actividad física intensa al aire libre a las siguientes personas sensibles: niños menores de 5 años, gestantes, personas mayores (a partir de 60 años) y personas con enfermedades como EPOC, asma, diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer.
Las autoridades también señalan que las personas con patologías o condiciones médicas de corte crónico o enfermedades deben seguir al pie de la letra los tratamientos prescritos. En especial, esta anotación hace referencia a los pacientes con asuntos respiratorios.