
¿Cómo fomenta su empresa el acceso de las mujeres a puestos de liderazgo y toma de decisiones?
En Repsol fomentamos la igualdad de género y el acceso de las mujeres a puestos de liderazgo y toma de decisiones a través de diversas iniciativas. Una es preparando la cantera de mujeres en dos dimensiones. La primera es mediante la presencia femenina en carreras STEM, trabajando a fin de tener paridad de contrataciones para puestos técnicos y así tener cantera futura en este tipo de posiciones. La segunda consiste en desarrollar a nuestra cantera de mujeres con potencial para liderar a través del programa de liderazgo femenino de la Universidad Pacifico. La idea es tener a las personas listas para cuando surjan las posiciones de liderazgo.
Además, en Repsol trabajamos en incrementar la representación femenina en un 35 % en posiciones de liderazgo en total. También promovemos una cultura organizacional que valore la diversidad y la inclusión, lo que contribuye a que más mujeres se sientan apoyadas y motivadas para asumir roles de liderazgo a través de programas de desarrollo de talento, mentorías, etc.
¿Cuál ha sido la evolución de mujeres en cargos de liderazgo en los últimos años?
En Repsol hemos pasado del 21 % de mujeres en cargos directivos hace 7 años, al 35 % en la actualidad, gracias a todas las iniciativas mencionadas.
¿Qué experiencia posee a lo largo de su carrera profesional?
Siempre he sido chancona. Creo que parte de mis buenos resultados es que soy la eterna estudiante, me encanta aprender. Estudié Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en Boston University, en Estados Unidos; hice un Máster en Dirección Comercial y Márketing en el Instituto de Empresa, en España; y he seguido estudiando toda la vida. Inicié mi trayectoria profesional trabajando en Shell en Perú; luego me fui a vivir y a trabajar en Europa y África, desempeñando distintos cargos en compañías tanto multinacionales, como pequeñas y medianas, pues también tuve una época de ser emprendedora e hice distintas consultorías.
¿Cómo llegó a Repsol?
Tras muchos años fuera de mi país, decidí que quería regresar y poder participar en algún proyecto social aquí, con el fin de mejorar la vida de las personas. En ese momento se presentó la oportunidad de trabajar en Repsol y no lo dudé. Todavía estábamos en pleno Covid, y regresar al Perú fue todo un reto.
Vine a ocupar el puesto de gerente de Experiencia al Cliente, el cual desempeñé por 11 meses. De ahí pasé a Comunicaciones y Relaciones Institucionales y finalmente a ser gerente sénior de Sostenibilidad y Gestión Social, puesto que desempeño desde hace 2 años y medio.
“Los desafíos a los que me enfrenté son los que actualmente siguen vigentes, a pesar de que obviamente cada día se mejora”.
¿Fue difícil desenvolverse en sectores mayoritariamente masculinos?
Es verdad que este era un sector mayoritariamente masculino, pero cada vez somos más mujeres ejerciendo cargos directivos. En varias ocasiones sentí que tenía que esforzarme más y demostrar mi valía cada día.
Los desafíos a los que me enfrenté son los que actualmente siguen vigentes, a pesar de que obviamente cada día se mejora. Las mujeres nos hemos enfrentado a múltiples desafíos para acceder a cargos directivos, como el techo de cristal, estereotipos de género, sesgos inconscientes y dificultades para conciliar la vida laboral y familiar. Además, la falta de redes de contacto, la baja representación en áreas estratégicas, la autoexigencia y el síndrome del impostor, que a veces limita nuestra confianza al asumir liderazgo.
¿Encontró el respaldo en otros líderes para crecer?
Por lo general he tenido buenos mentores y jefes, que me han alentado para siempre ser impecable e ir un paso más allá, transformando el esfuerzo diario en algo de lo que sentirme orgullosa. Como mujer y como líder, siento que la tarea continúa, debemos seguir trabajando conscientemente para eliminar los desafíos de género.
¿Alguna vez has tenido que enfrentarte a estereotipos o expectativas de género, ya sea de colegas o superiores? ¿Cómo has manejado esas situaciones?
Muchas veces, pero afortunadamente lo veo más como un tema del pasado. Para enfrentar estereotipos o expectativas de género en el trabajo, es clave cuestionarlos con educación, demostrar habilidades con hechos y promover una distribución equitativa de tareas. Al final del día, los resultados de tu trabajo hablan por ti, no es cuestión de género. Nunca me lo he tomado de manera personal, y de forma respetuosa, reconduces la conversación.
¿Hubo momentos específicos en los que sintió que su género era un obstáculo para avanzar? ¿Cómo lograste superarlos?
Hay momentos difíciles. Tuve la suerte de tener buenos embarazos y pude trabajar hasta el último día antes de dar a luz, pero soy consciente que yo misma tenía “barreras limitantes” y sentía que tenía que probar que seguía trabajando igual que siempre. Te preguntas ¿ser mamá es un impedimento para avanzar? Y creo que hay que ser consciente que todo tiene un costo.
En mi caso, sentí que eran otras mamás, que no trabajaban, las que me hacían comentarios como “qué pena que te pierdas esto o aquello de tu hijo”. Estas palabras que duelen me llevaron a una reflexión y toma de consciencia de la importancia de apoyarnos más entre mujeres, y desde entonces busco oportunidades para poder ayudar y fomentar el desarrollo de otras mujeres.
¿Qué mensaje brindarías a esas mujeres que afrontan también esta situación?
Si de algo sirve a las nuevas mamás, o a las que están pensando en la maternidad, les digo que sí se puede, no es fácil, pero claro que se puede. En mi caso particular, amo trabajar, me encantan los retos profesionales y disfruto aprendiendo cada día; nunca me planteé dejar de trabajar al ser mamá. A la vez, siempre supe que sería mamá; no sabía si me iba a casar, pero tenía muy claro que iba a ser mamá, y tener a mis dos hijos es el regalo más importante de la vida. Cada minuto de esfuerzo hecho por ellos, ha valido la pena.
Creo que en el mundo laboral ha habido muchos avances en este sentido, para que hoy podamos conciliar la vida laboral con la personal.
Como mujer en un rol de liderazgo, ¿sientes que hay una mayor presión por demostrar tu capacidad, y cómo manejas esa presión?
Me encantaría contestar que no, pero sí. Estoy muy acostumbrada a manejar esta presión. No digo que así debería ser, pero es parte de mi normalidad.
¿Qué tan fundamental es que las empresas puedan contribuir a esta igualdad de oportunidades?
Es importante que las empresas trabajen en fomentar la igualdad de oportunidades. Me encanta ver que en Repsol se presentan igual número de candidaturas de hombres y de mujeres para los puestos vacantes. Hay ocasiones en que no es fácil, pues generalmente hay menos perfiles STEM en mujeres.
Como empresas responsables, debemos trabajar más allá de nuestro entorno inmediato. La realidad de Repsol, no es la realidad del Perú. Por eso nos enfocamos en llevar a cabo programas de responsabilidad social con objetivo de género. En “Impulsared”, nuestro programa de capacitación y creación de empresas en el Norte chico, trabajamos para que el 70 % de las beneficiarias sean mujeres, buscando empoderarlas y darles a ellas y a sus comunidades, la oportunidad de generar ingresos sostenibles y tener una vida mejor.
¿Cómo te gustaría ser recordada por quienes han compartido contigo espacios laborales?
Me gustaría que me recuerden como una buena líder y persona; que se preocupa genuinamente por los demás, tanto a nivel de equipos como a nivel de las comunidades. En ambos casos espero haber aportado un granito de arena para ayudarlos a crecer.
Espero ser inspiración para que otras mujeres tejan redes, de manera que sigamos ayudándonos mutuamente. Siempre digo que ¡juntas podemos más!
Acciones y medidas concretas desde Repsol
• Política Salarial: Basada en la meritocracia y la equidad interna.
• Modelo de Desarrollo Profesional: Basado en la meritocracia, en el buen desempeño sostenido y en la posibilidad de ofrecer desarrollo horizontal y vertical, teniendo a la movilidad interna como una palanca de desarrollo.
• Programa de Liderazgo Femenino: Ofrecer herramientas específicas al colectivo de mujeres de la compañía. Hasta el momento han participado del programa 33 mujeres entre los años 2019 al 2024, y el 42 % de ellas han sido promovidas y han pasado a posiciones gerenciales.
• Capacitación en sesgos inconscientes: La empresa ha fomentado la toma de consciencia respecto a los sesgos inconscientes, a través de microlearnings, así como de charlas de capacitación, sobre todo de cara a las evaluaciones de desempeño, talento y contrataciones. La idea es garantizar una gestión de personas en donde se toman decisiones de talento basadas en la meritocracia, y que estas a su vez estén libres de sesgos.
• Compromiso de Liderazgo: La alta dirección de Repsol está comprometida activamente a promover la igualdad de género a través de múltiples acciones. Estas acciones reflejan el compromiso de Repsol por crear un ambiente laboral más justo y equitativo para todos.
• Paridad en todos los niveles: Establecer la paridad en el proceso de contratación y asegurar el uso de criterios de diversidad inclusiva en todas las etapas de desarrollo profesional, con el objetivo no solo de reducir la brecha de género, sino de garantizar la diversidad en todos los niveles. Al día de hoy, han cumplido con el objetivo de tener a un 35 % de mujeres en posiciones de liderazgo.
