Alemania autorizó el consumo recreativo de cannabis el último lunes, pese a la fuerte oposición de conservadores y asociaciones médicas, que temen consecuencias negativas para la juventud.
La ley señala que los adultos de más de 18 años podrán llevar consigo 25 gramos de marihuana en la vía pública, cultivar hasta 50 gramos y tener tres plantas por adulto en su domicilio. Tras esta decisión, cerca de 1.500 personas celebraron frente a la emblemática Puerta de Brandeburgo, en pleno corazón de Berlín.
El cannabis «sale de la zona tabú», señaló este lunes en la red social X el ministro de Salud, Karl Lauterbach, quien es médico. «Es mejor para una verdadera ayuda a los toxicómanos, para la prevención en los jóvenes y para la lucha contra el mercado negro», refirió.
Esta reforma coloca a Alemania entre los países más permisivos con el cannabis en Europa, junto con Malta y Luxemburgo, que legalizaron el consumo recreativo en 2021 y 2023, respectivamente.
Pese a que la ley entra en vigor este lunes, los consumidores deberán esperar tres meses para que puedan comprarla legalmente en «clubes sociales de cannabis«. De acuerdo con la ley, estas asociaciones podrán tener un máximo de 500 miembros y distribuir 50 gramos mensuales de cannabis por afiliado.
El gobierno del canciller socialdemócrata, Olaf Scholz, aliado con liberales y ecologistas, explica que la legalización contribuirá a luchar eficazmente contra el tráfico de drogas. Además, prometió una campaña sobre los riesgos del consumo y subraya que el cannabis continúa estando prohibido para los menores de 18 años y que no está autorizado su consumo a menos de 100 metros de escuelas, guarderías y plazas y parques infantiles.