Por Stakeholders
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La urbanización en los países de América Latina y El Caribe avanza rápidamente, pero la población rural continúa siendo una parte importante de nuestra sociedad. Se prevé que para el año 2030, algunos países de la región tendrán una población rural superior al 30%. Sin embargo, es evidente que las comunidades que carecen de servicios regulados de agua y saneamiento enfrentan mayores niveles de pobreza. El acceso a servicios básicos se vuelve más desafiante conforme incrementa la dispersión de la población rural.
En este contexto, es clave ayudar a las familias de menores ingresos a mejorar sus vidas mediante la producción y distribución de productos y servicios básicos accesibles y aspiracionales, de manera culturalmente pertinente, ambientalmente sostenible y económicamente rentable. Gracias a los cambios sociales, dinámicas económicas y políticas públicas, esto es posible.
“Nuestra experiencia en el desarrollo de soluciones sostenibles de saneamiento en entornos rurales dispersos nos ha permitido evidenciar las ventajas de priorizar los desafíos de la ruralidad, considerando principalmente el impacto en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como la educación, la salud, la equidad de género y el desarrollo económico, entre otros”, explica Gisela Murrugarra, directora de Water for People Perú.
Las soluciones importantes para promover desde Perú se enfocan en tres iniciativas clave:
- Incentivo municipal en saneamiento mediante autoconstrucción: Trabajar estrechamente con los municipios para fomentar la participación de las comunidades en la construcción y mantenimiento de sistemas de saneamiento.
- Puesta en valor de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) a través de emprendimientos e innovaciones tecnológicas: Promover el desarrollo de emprendimientos y la implementación de tecnologías innovadoras para mejorar la gestión de las PTAR y maximizar su impacto en la comunidad.
3. Acceso a saneamiento digno a través de Instituciones Microfinancieras (IMF): Trabajar en colaboración con IMFs para facilitar el acceso a financiamiento y crédito a las familias de bajos ingresos, permitiéndoles acceder a soluciones de saneamiento dignas.
