Por Isabella D’Angelo – Gerenta de Sostenibilidad en InRetail Pharma (Mifarma e Inkafarma)
La industria del transporte es una de las mayores fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y contaminantes atmosféricos. Según el Banco Mundial, el transporte nacional e internacional aporta el 20% de las emisiones mundiales de GEI. Además, mientras las poblaciones y las economías crezcan, estas emisiones podrían aumentar hasta un 60% para el 2050.
Nos encontramos en el marco de la Semana de la Movilidad Sostenible, fecha establecida para promover hábitos de transporte amigables con el ambiente, seguros y saludables que permitan reducir la contaminación y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Un vehículo se considera sostenible cuando utiliza energía amigable con el ambiente y promueve el consumo racional de los recursos. Andar en bicicleta, utilizar scooter eléctrico o incluso ir a pie son algunas de las opciones más comunes.
El delivery es un servicio que beneficia al usuario: ofrecerles la posibilidad de recibir un pedido en cuestión de horas o un par de días sin la necesidad de trasladarse, pagar estacionamiento y desplazarse por horas en un centro comercial puede resultar más económico y cómodo. Pero, a pesar de sus enormes beneficios, esto tiene un impacto negativo en el ambiente.
Según el estudio El futuro del ecosistema de la última milla del Foro Económico Mundial, en la próxima década, los envíos urbanos podrían aumentar hasta un 78%. No obstante, para satisfacer el deseo cada vez mayor de los clientes de comprar productos online, el número de vehículos de reparto aumentará un 36% hasta el 2030. En consecuencia, las emisiones del tráfico de reparto aumentarán un 32% y la congestión crecerá más de un 21%, lo que equivale a 11 minutos más de tiempo de viaje por pasajero cada día.
A pesar de que las motocicletas pueden alcanzar mayores velocidades, las bicicletas y scooters son casi iguales de efectivos, por lo que la experiencia del consumidor no se ve afectada. Cabe resaltar que el tiempo de entrega en bicicleta está estimado en 24 minutos; en vehículo eléctrico, en 25; y en motocicleta, en 23. Lo que desmiente el mito de que el transporte sostenible demora más.
Ofrecer un buen servicio y a la vez amigable con el ambiente nos permitirá mejorar la calidad de vida de los peruanos, al mismo tiempo que satisfacemos sus necesidades. Por tanto, sería esencial que el sector privado tome consciencia del impacto que genera su servicio de entregas a domicilio y apueste por el cambio, que los beneficiará a ustedes, sus usuarios, y al país.