La Organización de las Naciones Unidas (ONU) cuestionó el poco progreso obtenido en la lucha contra el racismo sistemático en el mundo. De acuerdo con un informe publicado por el organismo, los afrodescendientes afrontan problemas concretos para participar en asuntos públicos de sus países y violencia policial a causa de estereotipos raciales.
«Se siguen reportando muertes durante o después de interacciones con las fuerzas del orden, así como escasos progresos en la rendición de cuentas y reparación», señaló el alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk.
Cabe mencionar que el organismo de la ONU decidió compilar información sobre esta situación tras la muerte del ciudadano estadounidense afroamericano George Floyd, quien fue asesinado en el 2020 por un policía. Dicho episodio causó indignación internacional y provocó una ola de protestas dentro y fuera de Estados Unidos.
En este país, la población afrodescendiente representa el 14% de la población, pero las personas negras son víctimas de asesinatos por parte de las fuerzas del orden a una tasa dos veces mayor que la población blanca, según entidades nacionales que hacen un seguimiento de la violencia racial.
La ONU ha establecido que a pesar de la lucha de las familias de las víctimas se ha avanzado poco en el objetivo de la justicia y que «si se quiere superar el racismo, los Estados deben acelerar la adopción de medidas en favor de una participación más importante, inclusiva y segura» de los afrodescendientes para que puedan influir en la toma de decisiones políticas.
Türk lamentó que haya muchos países que no recopilan, publican o utilizan datos desglosados por raza y origen étnico, los que ayudarían a poner en marcha medidas jurídicas, políticas e institucionales dirigidas a «desmantelar el racismo sistémico en todos los ámbitos de la vida».