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Carmen Sánchez Falconí, Directora Adjunta de la Fundación Ayuda en Acción, señala que esta organización, en alianza con la Revista Stakeholders, promueve un proyecto que busca facilitar el acceso a financiamiento de micronegocios o emprendimientos familiares de pequeña escala, que fueron afectados por la pandemia.

POR DAVID RODRÍGUEZ ANDARA
drodriguez@stakeholders.com.pe

Carmen Sánchez Falconí,
Directora Adjunta de la Fundación Ayuda
en Acción

¿De qué trata el programa que puso en marcha la Fundación Ayuda en Acción para ayudar a los micronegocios o emprendimientos familiares de pequeña escala que han sido afectados por la pandemia?

La crisis generada por el COVID-19 en la economía peruana ha impactado en el sector de los pequeños negocios y emprendimientos, llevando a muchos a cerrar las puertas de sus empresas y locales, y quedarse prácticamente en la calle.

Para salir al frente de esta situación, la Fundación Ayuda en Acción busca crear conciencia sobre la necesidad de apoyar a los pequeños negocios y emprendimientos, cuya reactivación es fundamental para el crecimiento de la economía peruana y, por ende, para la generación de puestos de trabajo, que tanto se necesitan hoy en todo el país.

Al respecto, esta organización promueve un proyecto que busca facilitar el acceso a financiamiento de micronegocios o emprendimientos familiares de pequeña escala, que estén vinculados a cadenas agropecuarias, de pesca artesanal o comercios locales. De esta manera, las y los emprendedores recibirán incentivos y capacitaciones adicionales, que les permitirán reforzar competencias corporativas transversales e incrementar sus ganancias.

Desde la Fundación Ayuda en Acción hemos identificado 576 micronegocios y emprendimientos familiares que han perdido su capital de trabajo durante la pandemia, y sus pequeños negocios no han logrado recuperarse. Por ello, dependen de un bono económico para reactivarse y recuperar sus medios de vida.

¿Por qué es necesario que el sector privado se involucre y brinde su apoyo a este tipo de programas e iniciativas?

La forma en que las empresas han contribuido a mitigar las consecuencias sanitarias, sociales y económicas derivadas de la COVID-19 es muy variante. Desde la donación económica, de alimentos, productos o servicios, hasta la transformación de su cadena de producción para la fabricación de respiradores, mascarillas o geles desinfectantes. Todas ellas son ejemplos de empresas comprometidas con su entorno y sus grupos de interés.
La gestión de la incertidumbre en las próximas semanas y meses es ya hoy uno de los grandes retos de la sostenibilidad. Ante un escenario como el actual, la mejor solución no es hacer cualquier negocio de forma responsable, sino hacer negocio responsable creando y ofreciendo soluciones a los problemas de la sociedad, y manteniendo los puestos de trabajo, los clientes y los acuerdos con proveedores.

El reto, en un escenario de creciente vulnerabilidad ambiental, social y económica, es fortalecer la colaboración entre múltiples actores (gobierno, empresas, entidades sociales, etc.). En ese sentido, desde la Fundación Ayuda en Acción impulsamos la cooperación y la corresponsabilidad de las personas ante los intereses comunes, a través de redes y alianzas comprometidas con reducir la desigualdad para erradicar la pobreza; y promoviendo la solidaridad de las personas.

En un contexto como el actual, las empresas tienen la oportunidad de convertir su compromiso social en su mejor valor añadido. La Agenda 2030 y sus 17 Objetivos para el Desarrollo Sostenible (ODS) reconoce la necesidad de llevar a cabo alianzas multidimensionales que convoquen a diferentes sectores de la sociedad para garantizar el bienestar y la continuidad de nuestro sistema de vida.

Ser socialmente responsable es altamente valorado por inversores, empleados y clientes. Las alianzas corporativas permiten poner en valor el aporte de todos los grupos de interés y desde Ayuda en Acción resaltamos esa contribución en nuestros canales de comunicación.

Las donaciones están reguladas por instituciones públicas, como la Sunat a quien rendimos cuentas. Esto nos permite emitir Certificados de Donación deducibles de impuestos, que pueden ser presentados por la empresa en la Declaración de la Renta Anual.

Además de reforzar el compromiso social de las empresas, ¿qué otras ventajas competitivas podrían generar las organizaciones a través de la ayuda a iniciativas de este tipo?

La pandemia nos ha convencido de que el mundo necesita empresas que ayuden a mejorarlo. Y aquí estamos nosotros, para ayudar a las empresas en ese proceso y darles la oportunidad de convertir su compromiso social en su mejor valor añadido.

Para más información del proyecto, pueden entrar a https://ayudaenaccion.org.pe/alianzas-que-ayudan/







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