La gerente general de Coca-Cola Perú compartió con Stakeholders la proyección que tiene la compañía en materia de reciclaje, apuntando hacia un modelo de economía circular.
—¿Por qué una empresa como Coca-Cola debe promover la economía circular?
Gracias a las dimensiones y alcance global que tiene Coca-Cola, podemos ayudar a cambiar la forma en que se fabrican los empaques, y que se diseñen para que tengan más de una vida, y que puedan ser parte dela economía circular del plástico. La clave para seguir mejorando es entender que los envases tienen un valor y partir desde el diseño de los mismos bajo este concepto. Tender hacia una economía circular es el objetivo de estas acciones: un sistema que le de valor a los productos y a los materiales, para que se mantengan como bienes el mayor tiempo posible y, paralelamente, reducir la cantidad de residuos. Por esta razón, también la retornabilidad de los envases es una herramienta poderosa que estamos potenciando.
—¿De qué forma se vincula la sostenibilidad con el desarrollo de sus operaciones que involucra a toda la cadena de valor?
La sostenibilidad está en el ADN de nuestro negocio y a lo largo de toda nuestra cadena de valor, procuramos con cada acción crear valor no sólo para nuestros accionistas, sino también para la sociedad y el planeta. Es por eso que en el 2018 lanzamos Un Mundo Sin residuos, un compromiso global mucho más amplio que consiste en crecer con conciencia, convirtiéndonos en una Compañía Integral de bebidas que trabaja haciendo las cosas bien y no de la manera más fácil. Hacemos lo que corresponde por nuestro planeta, por nuestras comunidades y por nuestro negocio. En el Sistema Coca-Cola llevamos más de 20 años desarrollando empaques sostenibles, impulsando el reciclaje y promoviendo la retornabilidad. Además, tenemos el compromiso de reponer el 100 % de agua que utilizamos en la fabricación de nuestros productos, y en Perú lo hacemos con un proyecto en Oxapampa.
—¿En qué consiste la iniciativa “Un Mundo sin residuos” y cuáles son los resultados alcanzados hasta la fecha?
Este año marcamos un hito importante en cuanto al reciclaje en nuestro país, siendo el primer sector empresarial en Perú en firmar un Acuerdo de Producción Limpia con el Ministerio del Ambiente y el Ministerio de la Producción, en el que nos comprometemos a mantener la incorporación de material reciclado en la fabricación de nuevos envases, incrementar la retornabilidad de nuestros empaques y generar alianzas con diversos actores públicos y privados para impulsar el reciclaje de botellas. Este acuerdo representa un paso más en el camino que venimos recorriendo junto a Arca Continental Lindley, pero todavía queda mucho por hacer.
A través de nuestro compromiso global Un Mundo sin Residuos, invertimos en nuestro planeta, en nuestros empaques y buscamos tener un impacto positivo en las comunidades. Coca-Cola lidera la industria con un objetivo audaz y ambicioso: ayudar a recolectar y reciclar, para el año 2030, el equivalente al 100% de los empaques que ponemos en el mercado. Esta meta no la alcanzaremos solos, sabemos que las alianzas con las comunidades locales, con ONG’s, con otras empresas y con el Estado, son claves para hacer énfasis en este tema crítico. Cuando todos nos reunamos para contribuir con la solución de este problema, juntos haremos una diferencia mayor que si simplemente trabajamos de forma aislada.
Buscamos que nuestros envases, después de un proceso, puedan regresar nuevamente a ser una botella o puedan reutilizarse en otras aplicaciones. En Perú trabajamos bajo la filosofía de economía circular, con las 3R como base: reducir, reutilizar y reciclar.
- Reducir: Promovemos el aligeramiento de nuestros envases reduciendo la cantidad de plástico utilizado en nuestras botellas. Por ejemplo, con las botellas Ecoflex de la marca San Luis. Este aligeramiento de las botellas nos ha permitido reducir más de 5.000 toneladas de PET en los últimos años.
- Reutilizar: Promovemos el uso de envases retornables. Más del 35% de nuestras ventas provienen de envases retornables de vidrio y plástico, y apuntamos a que este porcentaje siga aumentando en los próximos años. Los envases de plástico pueden utilizarse en 15 ocasiones y los envases de vidrio hasta 30 veces.
- Reciclar: Nuestros envases son 100% reciclables y fabricados con materiales renovables. Además, nuestro portafolio ya cuenta con botellas fabricadas con 25% de plástico reciclado.
A la fecha, nos hacemos cargo del 50 % del plástico que ponemos en el mercado, y seguiremos impulsando los diferentes programas para alcanzar el 100 % de recolección y reciclaje de las botellas al 2030.
—El Sistema Coca-Cola lidera la industria con un objetivo audaz y ambicioso: ayudar a recolectar y reciclar una botella por cada una de las que vende para el año 2030. ¿En qué medida esto es posible y/o alcanzable?
Somos conscientes que es una meta ambiciosa pero totalmente alcanzable si nos enfocamos. Para lograrlo, seguimos un plan enfocado en todo el ciclo de vida de los empaques: desde cómo se diseñan y fabrican botellas, hasta cómo son recolectadas, recicladas y reutilizadas.
La clave para seguir mejorando es ver a los residuos como una oportunidad y entender que los envases tienen un valor. Tender hacia una economía circular es el objetivo de estas acciones: un sistema que le dé valor a los materiales y a los productos, para que se mantengan como bienes el mayor tiempo posible. Y paralelamente reducir la cantidad de residuos.
Esto lo haremos a través de las siguientes acciones:
- Diseño: Nuestros envases ya son 100 % reciclables y fabricados con materiales renovables.
- Recolección: medidas para ayudar a garantizar que todos los envases sean recolectados y reutilizados, y no terminen en el lugar equivocado.
- Alianzas: trabajo con socios relevantes para abordar problemas críticos con los residuos; así como, otras compañías, miembros clave de la industria, clientes, gobiernos, ONG y organizaciones internacionales.
—¿Quiénes son sus aliados estratégicos que contribuyen a su labor de reciclaje?
Cuando hablamos de la construcción de un mundo sin residuos, todos somos aliados, si algo se puede reciclar, se debe reciclar, por lo que nuestra meta es ayudar a las personas de todo el mundo a entender cómo hacer su parte.
Nuestro principal aliado es Arca Continental Lindley, embotellador exclusivo de Coca-Cola Perú, juntos y con el apoyo de nuestro aliado San Miguel Industrias (SMI), hemos dado un paso más dentro de la economía circular del plástico, donde SMI ya compra el PET reciclado a asociaciones de recicladores formalizadas por el Sistema Coca-Cola. Con estas iniciativas también generamos un alto impacto social, ya que el trabajo de los recicladores se convierte en una poderosa herramienta de generación de empleo a la vez que se contribuye con el cuidado del medio ambiente. Tenemos también alianzas con Ciudad Saludable y autoridades locales de Arequipa, donde trabajamos en la formalización de cientos de recicladores, impactando a más de 150.000 familias en las buenas prácticas de reciclaje. Además, trabajamos de la mano con recicladores de base, apoyándolos en su formalización y brindándoles los instrumentos necesarios para que puedan recolectar y acopiar mejor los residuos, y que tengan acceso a mejores precios de mercado.
—Como parte de un consumo responsable, ¿cuál es la estrategia que desarrollan con sus clientes para fomentar el reciclaje? ¿Existe alguna campaña de comunicación y sensibilización al respecto?
Nuestros empaques son 100 % reciclables, incentivando a nuestros consumidores a sumarse y a hacer su parte al segregar y reciclar sus residuos. Buscamos sensibilizar a la sociedad y apoyarlos a comprender qué, cómo y dónde reciclar. Si la gente sabe que cuando reciclan una botella, en lugar de terminar en un relleno sanitario, irá a una asociación de recicladores, una planta de reciclaje, y volverán a convertirse en botellas, entenderán que son parte de la economía circular del plástico. Además, impulsamos la retornabilidad a través de diferentes campañas, con comerciales, promociones en punto de venta y campañas en redes sociales.
Este año hemos apoyado al Instituto Vida con la promoción y realización de limpiezas de playas en Lima y Callao, donde buscamos sensibilizar a las personas sobre qué está sucediendo con los residuos en nuestro país y a partir de ahí, reflexionar sobre las acciones que cada uno puede realizar, fortaleciendo la importancia del reciclaje y la necesidad de gestionar los residuos correctamente. Buscamos dar un mensaje claro, que pueda permanecer en el tiempo y logre cambiar los hábitos de reciclaje de las personas.
Otro ejemplo es la campaña Ponchila, donde a través de una alianza con Pacífico Seguros, Wong y Metro, nació la Ponchila, una mochila que incorpora un poncho y está hecha de la fibra de 80 botellas plásticas (PET) recicladas. Gracias a la campaña de concientización en el cambio de hábitos de reciclaje, se logró recolectar más de 1 millón de botellas y se fabricaron más de 13 mil ponchilas que fueron llevadas a los niños de diversas comunidades en las zonas alto-andinas del país.
—¿Cómo ve a Coca-Cola en los próximos 3 años?
Somos una compañía integral de bebidas que proyecta su crecimiento escuchando a las personas, estando atenta a las tendencias y poniendo en marcha acciones concretas para crear oportunidades compartidas. Formamos parte de un sistema conformado por una extensa la cadena de valor: desde agricultores, hasta bodegueros, transportistas, asociados, recicladores, miles de personas en el país. La sostenibilidad está integrada en todos los aspectos, en todos los eslabones, de nuestro negocio.
En los próximos tres años seguiremos trabajando en ser un negocio sostenible, impulsando el empoderamiento de las mujeres en nuestra cadena de valor, trabajando de forma conjunta con diferentes aliados en el desafío global del plástico y seguiremos adelante en nuestro compromiso con el agua, para extender nuestro compromiso de reposición de agua a la naturaleza a nuestra cadena de valor. Todo esto, generando un impacto positivo en las comunidades.