Por Stakeholders
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El término “Responsabilidad Social Corporativa” está hoy en boca de todos, con muchas empresas atentas a las oportunidades de presentarse a sí mismas…
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El término “Responsabilidad Social Corporativa” está hoy en boca de todos, con muchas empresas atentas a las oportunidades de presentarse a sí mismas como socialmente responsables. En Faber-Castell, por otra parte, el compromiso social ha sido parte de la filosofía de la empresa por más de 160 años. Lothar von Faber, perteneciente a la cuarta generación que lideró la empresa familiar (de 1839 a 1877), creía en la necesidad de ocuparse del bienestar de sus trabajadores. En 1844, estableció uno de los primeros esquemas empresarios de salud y uno de los primeros jardines de infantes en Alemania. También financió la construcción de viviendas, escuelas y una iglesia.
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Faber-Castell siempre ha colaborado de cerca también con los gremios. Así, en el año 2000, se constituyó en una de las primeras empresas en ratificar una “Carta de Compromiso Social” internacional junto con el gremio más importante de Alemania, IG Metall. La Carta de Compromiso de Faber-Castell se aplica a todas las empresas del grupo y garantiza las condiciones de empleo recomendadas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Entre otras cosas, la Carta incluye una prohibición del trabajo infantil, igual oportunidad y trato justo independiente de raza, religión, género, o nacionalidad; la provisión de condiciones de trabajo seguras e higiénicas y el pago de salarios justos adecuados a la tarea. Cada dos años una comisión independiente controla que los estándares establecidos por la Carta Compromiso estén siendo correctamente implementados.
Ahora que la Carta de Compromiso Social ha sido exitosamente adoptada en todas la subsidiarias en el mundo entero, Faber-Castell se ha impuesto un objetivo ulterior: el de extender esta Carta a sus proveedores. Esta implementación contará con la estrecha cooperación con IG Metall. En el futuro, la empresa se propone utilizar sólo proveedores que acepten y apliquen la Carta de Compromiso Social de Faber-Castell. La implementación contará con varias etapas. Todas las subsidiarias de Faber-Castell en el mundo han distribuido un cuestionario en el cual sus proveedores deben autoevaluarse respecto de los ocho artículos de la Carta. A todos se les ha dicho que se les medirá en base a estos criterios en el futuro y que cada respuesta incorrecta o tendiente a confundir pesará en su contra de igual manera que la mala calidad de sus productos. Los resultados serán reunidos y consolidados durante auditorías regulares. En un paso siguiente, si algún cuestionario fuera devuelto incompleto o pareciera contener contradicciones, o si hubiera razones para sospechar que determinados proveedores no se ajustan a todas la condiciones, serán observados detenidamente por los compradores de Faber-Castell de acuerdo con las líneas de conducta que se aplican internacionalmente. Este procedimiento ya se está aplicando en Brasil como parte de un estudio piloto. Los resultados están siendo evaluados actualmente para poder desarrollar un proceso de monitoreo que comprometa a todas la subsidiarias. De este modo, la responsabilidad social corporativa es mucho más que sólo una estrategia de mejora de la imagen a corto plazo para Faber-Castell: en el largo plazo afectará también a otras empresas. Fuente:
Contenido:Creativa Empresarial. Imagen:Creativa Empresarial. |
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