Por Stakeholders

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Un interesante estudio realizado por el Fondo  de Agua para Lima y Callao (AQUAFONDO) fue presentado en el mes de mayo del presente año, bajo el título “Huella Hídrica de los usuarios de agua en Lima Metropolitana”.

La investigación da cuenta de que la demanda de agua en la capital ha crecido en los últimos años y lo seguirá haciendo para los siguientes. Según las conclusiones del estudio, la Huella Hídrica de Lima Metropolitana es seis veces mayor que en Quito (Ecuador) y 30 veces más que en La Paz (Bolivia).

En su explicación más difundida, la Huella Hídrica (HH) se refiere al consumo de agua que se hace desde cualquier usuario. Sin embargo, es una variable multidimensional que sirve para medir tres aspectos esenciales de una sociedad cuando consume agua: HH Azul (uso de fuentes superficiales o subterráneas), HH Verde (uso de agua procedente de precipitaciones) y HH Gris (cantidad de agua necesaria para diluir contaminantes). 

Estos tres puntos fueron tomados en cuenta por la investigación de AQUAFONDO, quienes analizaron datos del año 2018 con información proveniente del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal) y la Autoridad Nacional del Agua  (ANA).

Los resultados muestran que en 2018 el volumen total de la HH directa fue de  2.746 de millones de metros cúbicos (MMC). Asimismo, HH Azul directa tuvo un total de 717 MMC, siendo el sector residencial el de más consumo con un porcentaje de 72%, seguido por el comercial (10%), industrial (7%), agrario (6%) y público (4%). Es decir, esa fue la cantidad de agua total extraída de las cuencas. Lima se abastece de agua de las cuencas de los ríos Rímac, Chillón y Lurín, y adicionalmente de un trasvase del río Mantaro.

Por otro lado, la HH Gris directa fue para 2018 de 2.029 MMC, un dato sorprendente que muestra que esta cantidad duplica el volumen de agua que trae el río Rímac por año. De la misma manera, el sector residencial representa en su uso el 91% (1.852 MMC) junto al comercial en esta oportunidad.  

Además, el estudio revela que el aumento de la demanda del agua viene como consecuencia de factores como la densidad poblacional y el tratamiento de agua residual, por ejemplo. Respecto a qué sectores de la capital son los más demandantes, como era de esperarse, San Juan de Lurigancho (distrito más poblado) figura en primer lugar con 60,11 MMC en HH Azul. Atrás vienen Ate (49,15 MMC), San Martín de Porres (40,40 MMC) y otros distritos.

“Huella Hídrica de los usuarios de agua en Lima Metropolitana” hace también una comparativa determinante al concluir que el consumo de agua ha crecido y será mayor al menos hasta el año 2030. 

Para el 2016 un habitante tenía una HH Azul de 42 m3/ año, al 2018 ésta aumentó a 50 m3/ año. De seguir la tendencia de crecimiento en  un 1,2 % anual en la HH Azul identificada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) en el 2017 y comprobada por este estudio de AQUAFONDO, 1.096 MMC de agua serían consumidos para 2030, casi el doble en relación con  2016 (668 MMC a 1.096 MMC).

Las conclusiones a las que llega el informe de AQUAFONDO permiten deducir una situación  preocupante para Lima Metropolitana y el Perú en el tema, especialmente en el contexto de la pandemia por el COVID-19. Y es que este estudio también recuerda que después de Bangladesh y Honduras, Perú es el país más vulnerable al cambio climático. En los próximos años, y tras superada la actual crisis, esto representa para el país un reto a solucionar en cuanto a que el agua es un bien vital para la salud, alimentación, agricultura, entre otras cosas.







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