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Aje e Inkaterra vienen realizando un trabajo conjunto a la Municipalidad de Machu Picchu
Pueblo para lograr el reciclaje total de residuos en la ciudad milenaria.

Continuando con las iniciativas para la conservación y el cuidado medioambiental de Machu Picchu, la multinacional peruana, Grupo AJE, en alianza con la cadena de hoteles Inkaterra, presentó la primera Planta de Transformación de Aceite en Biodiesel y Glicerina en las inmediaciones de Inkaterra Machu Picchu Pueblo Hotel, con el objetivo de proteger al río Vilcanota de los más de 2 mil litros de aceite vegetal usado, desechados en su caudal mensualmente.

De acuerdo a estudios, un solo litro de aceite usado contamina mil litros de agua. Ante esta situación, la Planta de Reciclaje de aceite usado del Grupo AJE e Inkaterra será de vital importancia para el tratamiento de dichos residuos, con los que ya se viene recolectando,
en promedio, 600 galones de aceite al mes, produciéndose 20 galones diarios de combustible biodiesel. El uso de biodiesel disminuye las emisiones de carbono a 44%, en comparación con el combustible tradicional.

“Este trabajo conjunto entre AJE e Inkaterra inició el año pasado cuando entregamos al Gobierno Municipal de Machu Picchu Pueblo la Planta Compactadora de Residuos Plásticos, medida que contribuyó a evitar que Machu Picchu ingrese a la lista de Patrimonios Culturales en Riesgo de la UNESCO. Queremos demostrar que Machu Picchu puede ser sostenible, usando un modelo económicamente accesible y replicable en otras ciudades del Perú”, indicó el Director ejecutivo de Comunicaciones y Sostenibilidad del Grupo AJE, Jorge López-Dóriga.

Buscando fomentar el uso de un combustible eco-amigable, ambas empresas en asociación con el Gobierno Municipal de Machu Picchu, buscan sensibilizar a la población local para que donen el aceite vegetal usado. Asimismo, una parte importante de la glicerina obtenida
en el proceso de fabricación de biodiesel será destinada al Gobierno Municipal de Machu Picchu para la limpieza de los pisos de piedra en todo el distrito, evitando de esta manera el uso de productos químicos.

“En esta alianza con AJE, queremos lograr que nuestra maravilla mundial sea vista como un destino turístico sostenible y un ejemplo para el mundo. Buscamos que los productos que se obtienen con la Planta de Transformación de Aceite en Biodiesel y Glicerina tengan
utilidad en nuestros hoteles y en toda la comunidad de Machu Picchu, como parte de nuestro esfuerzo por promover la conservación de la biodiversidad a través de la reducción de emisiones de carbono”, señaló José Koechlin, presidente de Inkaterra.

Cabe resaltar que el esfuerzo y preocupación de AJE e Inkaterra no es reciente, ya que hace 3 años empezaron donando una máquina compactadora de residuos, lo que permitió que sea mucho más fácil el transporte de los desperdicios. Una de las principales complicaciones en este ámbito se da por la ubicación geográfica de Machu Picchu, ya que la única manera de que los residuos dejen la ciudad es por medio del tren.

A pesar de ello, la ciudad de Machu Picchu actualmente recicla poco más del 80% de sus residuos, alcanzando estándares  internacionales mantenidos solamente por urbes europeas.

“El PET (tereftalato de polietileno) está siendo compactado y de lo que teníamos por ejemplo 90% ahora lo hemos reducido al 30%. Para nosotros es complicado transportar el residuo sólido. Entonces con eso se nos abarata costos. Al momento de hacer la compactación, que nos dona de acuerdo al convenio AJE, y también con el proyecto que tenemos con Inkaterra, y dicho sea de paso quiero también manifestar que dentro de los socios estratégicos de Inkaterra nosotros hemos generado un patronato por Machu Picchu”, mencionó Armando Mujica, Gerente Municipal de Machu Picchu Pueblo, agradecido con la articulación tan eficaz entre las empresas privadas del distrito y la administración pública.

La preocupación genuina por la comunidad de impacto es una muestra evidente de compromiso y voluntad. Algo que Inkaterra pudo entender hace más de 30 años. “Desde los años 70, en el año 76, convirtieron un aserradero y una zona de ganadería en el bosque de
nubes que tenemos hoy, Todo un proceso de restauración de un bosque, preguntándole a las comunidades qué especies eran nativas, que flora nativa existía aquí, que especies de aves estaban acá, qué alimentos necesitaban las aves para volver. Y poco a poco se fue
restaurando el ecosistema que tenemos hoy y que hace de Machu Picchu uno de los pocos patrimonios, tanto cultural como natural”, afirmó Gabriel Meseth, Jefe de Comunicaciones de Inkaterra.

Ambas empresas continuarán su apoyo al distrito de Machu Picchu a través de nuevas iniciativas como la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos que producirá Bio-carbón (fertilizante natural). Esta nueva planta tendrá capacidad para procesar 4TM de residuos por día y generará más de 1TM de Bio-carbón a diario, siendo una solución eficiente y ecológica que, además, reducirá las emisiones de CO2 en un 90%.

¿Cómo funciona la Planta de Transformación de Aceite en Biodiesel y Glicerina?

El aceite recolectado se filtra con cernidores para luego ser depositado en cilindros, evitando que pueda entrar cualquier otra partícula. Se mantiene en reposo por un periodo de 72 horas para que en ese periodo de reposo se separe el aceite del agua. El aceite usado en frituras viene con bastante agua y la presencia de esta si afectaría a la calidad del biodiesel. Entonces al dejarlo en reposo, el agua se va sedimentando y el aceite se va a la parte superficial.

Después de cumplirse un día se traspasa a otro cilindro, nuevamente por 24 horas. Se traspasa una vez más al último cilindro en el cual se recolecta el aceite. Una vez que ese aceite está listo, antes de ponerlo en la máquina, se mide el índice de acidez. Es importante la medición del índice de acidez porque a partir de ello se determinará la cantidad de soda caústica y la cantidad de metanol que se usará para hacer la mezcla y lograr el biodiesel.

En esta etapa se utiliza el hidróxido de potasio y la fenolftaleína que son colorantes para poder determinar la acidez del aceite. Con una bureta graduada a 50 mililitros lo que se busca es neutralizar el alcohol. Se echan 50 ml. de alcohol, 5 gotas de fenolftaleína y 5 gotas de hidróxido de potasio para neutralizar el alcohol. Este proceso es una medición en general que se hace para todo tipo de productos.

¿Cómo funciona la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos para Bio-carbón?

Consta de un proceso de 4 horas en el cual la basura de origen orgánico se quema sin utilizar combustibles, con el propio carbono que emiten. Esta puede alcanzar una temperatura de 900 C°. Al contener altos niveles de carbono es un excelente fertilizante.

Es importante recordar que esta técnica ya era aplicada por pueblos originarios de la Amazonía desde hace más de 3000 años ya que sus principales beneficios incluyen la mejora del suelo, el aumento de la retención de agua, aumento de la producción y evita la pérdida de nutrientes. Se corona de esta manera como la opción más eficiente, económica y viable frente a rellenos sanitarios o producción de compost. Esta tecnología solo requiere de 500 mt2 y menos de 839 tm de CO2 al año.







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