Por Stakeholders

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Estamos acostumbrados a que las empresas destacadas y líderes en responsabilidad social empresarial (RSE) sean aquellas con mayor capacidad productiva o de una rentabilidad mayor al promedio. Sin embargo, el Distintivo Empresa Socialmente Responsable (DESR) no sigue estos paradigmas y cree en las micro, pequeñas y medianas empresas que tengan el compromiso firme de generar valor social desde sus operaciones hacia sus principales grupos de interés.

En esa línea trabaja BIGMOND, pyme destacada en selección de ejecutivos y consultoría. Stakeholders tuvo la oportunidad de conversar con Fernando Gonzáles, CEO de BIGMOND, quien nos comentó sus primeras impresiones luego de haber recibido este importante reconocimiento por parte de Perú 2021.

¿Cuál es el trabajo que desarrolla BIGMOND?

BIGMOND es una firma peruana de selección de ejecutivos y consultoría que brinda un servicio de alta calidad a empresas competitivas que promueven las prácticas en RSE y conservación del medioambiente. Está conformada por el directorio, integrado por catorce colaboradores y siete ejecutivos asociados, en los diferentes países donde tenemos capacidad de producción. Nuestra firma cuenta con un propósito claro: promover la igualdad de oportunidades laborales.

Hasta la fecha, hemos obtenido diferentes reconocimientos como la certificación ISO 9001 de calidad para nuestros servicios de proceso de selección y el programa onboarding, y el DESR, otorgado por Perú 2021. Contamos con un protocolo antifraude para contratación de posiciones sensibles y también con la certificación internacional como Empresa de Carbono Neutro, a través de la certificadora A2G, y la membresía de la Declaración de Lima por la Igualdad de Género en las organizaciones.  Además, somos miembros del Pacto Mundial de las Naciones Unidas.

¿Qué significa para ustedes este tipo de reconocimientos siendo una pyme?

Haber recibido el DESR, siendo una de las cinco pymes más reconocidas, nos brinda mucha alegría y lo recibimos también con bastante entusiasmo. Desde la concepción del plan de negocios de la firma, siempre hemos tenido muy claro la importancia de generar valor a través de la solución de necesidades.

En nuestro caso, estamos orientados a brindar servicios de selección de personal, ejecución de consultoría, pero cumpliendo con nuestro rol social, convencidos que las actividades de RSE y conservación del medioambiente no son exclusivas de las empresas grandes. Lo que se necesita es que la gestión de la RSE se encuentre en el ADN de los líderes de las organizaciones, quienes tienen el poder para conectar estas prácticas.

Esta gestión no debería desviar constantes recursos para sus fines. Por el contrario, debe apelar a la integración y participación de los colaboradores y la asociatividad con otras organizaciones, mirado hacia los stakeholders, y saber aprovechar las oportunidades para crear valor social.

¿Cuáles son los objetivos a alcanzar de cara al próximo año?

Lo primero es tener una mayor accesibilidad a través de medios para levantar nuestra voz y proponer de manera activa la aplicación de buenas prácticas en igualdad de oportunidades laborales. Lo segundo radica en tener un mayor alcance, dado que contamos con programas estructurados, debidamente planificados, organizados y conducidos.

En ese sentido, queremos hacer un upgrade de estos programas para que tengan un mayor impacto. Lo tercero es contarles a otras pymes que es posible implementar estas prácticas para romper el paradigma que siempre está presente en el mercado.

¿Cuáles son sus principales logros?

Principalmente, el haber incluido dentro del funcionamiento de la empresa el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que forman parte del Pacto Mundial. Además, es satisfactorio contar con un equipo de trabajo que conoce y está comprometido con las buenas prácticas de RSE.

Este aspecto es fundamental, ya que no necesariamente el gerente general o el área de RSE son quienes lideran las actividades, sino que existe una participación activa y voluntaria de todos nuestros colaboradores. También somos una empresa que ha trabajado en la gestión y buena práctica del reciclaje, el cuidado del consumo de energía, etc.

En efecto, existe una estructura social que es parte de un sistema, cuyo eje central permite desafiarnos cada vez más, con el fin de realizar diversas actividades que tengan un mayor impacto en la sociedad.

¿Desea agregar algo más?

Creo que debería haber más espacios como la revista Stakeholders, en los cuales compartir experiencias, prácticas, actividades y estándares que sirvan de ejemplo y de referencia a otras organizaciones para que las puedan aplicar. Creemos que hace falta desarrollar en el mercado un mayor acceso a la calidad de la información en temas de RSE para que aquellos que quieran implementarlos en sus propias organizaciones lo puedan hacer.

 







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